Cuando la creencia generalizada por Tamaulipas es que Morena llegará cantando y cosiendo en junio del próximo año, el Oráculo advierte señales de peligro en el camino que si no las atienden se van a topar con una sorpresa y de las mayúsculas.
Por lo anterior, tienen que encontrar y pronto a un adalid que encabece a todos los que militan y simpatizan con el partido guindo, porque aunque el Comandante Azul por ahora anda arrastrando la cobija eso no implica que ya entregó la plaza, como lo revela su reciente declaración de que “las victorias como las derrotas no son para siempre”.
La frase de referencia por supuesto no es de su autoría, pero sí deja de manifiesto que van a dar la pelea y por lo pronto ya lanzan señales de amistad a los priistas, que por no haberlos querido en coalición en las elecciones el pasado 6 de junio perdieron el control del Congreso del Estado.
¿Y CÓMO SALIERON?
Bueno, pues con los 133 mil 537 votos que obtuvieron los candidatos del PRI a diputado local, sumados a los 517 mil 945 del PAN, hubieran rebasado sobradamente a los 549 mil 319 sufragios obtenidos por los morenistas, y como ahora solamente va la gubernatura, o sea, un todo o nada, los panaderos le hacen carantoñas a los priistas.
Pero como éstos andan muy heridos en sus sentimientos por tanto desdén y, en algunos casos, hasta persecución, le hacen al remolón, demostrando que desconfían de la palabra del Comandante Azul y sus propuestas de alianza.
De manera que, ante la posibilidad de la coalición PRIAN, el Morena va a tener que escoger como candidato a uno que sume a todos, y que les haga sentir que están convidados aunque hayan simpatizado con otros prospectos, porque tomar actitudes como las del PRI de los setentas es echar por la borda los resultados del pasado 6 de junio.
De ahí la importancia de que el candidato sea un hombre con el control de sus emociones, que no permita el que sus seguidores lo mantengan alejado de los otros.
Tienen varios prospectos de buena factura, sobresaliendo de entre ellos Rodolfo González Valderrama, quien ya tiene fama pública por su temple, aptitud y actitud para gobernar, sin embargo, es solamente un prospecto, y los otros tienen lo suyo, pero por lo mismo tendrán que pactar un compromiso de que quien sea el elegido sumará a los otros, porque el Comandante Azul no va a entregar en maceta la gubernatura, aunque se retire antes de la primavera del próximo año.
¿Y COMO VA EL DESAFUERO?
Pues ya está en manos de los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación quienes van a precisar los alcances del artículo 111 constitucional, que por un lado faculta a la Cámara de Diputados a eliminar el fuero de los gobernadores y también separarlos del cargo hasta en tanto estén sujetos a proceso penal, pero por el otro le obliga a comunicárselo a la Legislatura Local para que en ejercicio de sus atribuciones procedan como corresponde.
Y como decía Aristóteles: “que los magistrados decidan sólo los asuntos en que las leyes nada resuelven con exactitud”, y casualmente de eso trata la controversia de los diputados locales en contra de los federales, los primeros reclaman de los segundos, que les invaden su autonomía y la soberanía de Tamaulipas.
Esto causó confusión o mal interpretación en los diputados locales de Tamaulipas, por lo que serán los ministros de la SCJN los que pondrán las cosas en su lugar.
Si respaldan la determinación de la Cámara de Diputados federal, se tendrá que nombrar un gobernador sustituto, algo para lo que evidentemente ya se prepara el comandante azul, al promover sin recato ni medida a César Truco Verástegui y a Gerardo Peña Flores.
De tal forma que esos destapes no se sabe si fueron para gobernador sustituto o para la candidatura a gobernador, y de ahí se deriva la suposición que para las próximas fiestas patrias habrá nuevo inquilino, pero que aun bajo esa circunstancia el Comandante Azul seguirá maniobrando con el lógico objetivo de retener la candidatura, así no sea uno de los suyos el candidato, obvio con excepción de Maki Ortiz.
¿Y A PROPÓSITO,
QUÉ ONDA CON MAKI?
Pues no la han soltado con todo y la sonora victoria de sus huestes en las elecciones municipales de Reynosa, en donde barrieron con los 7 candidatos azules, porque no le aflojan a la persecución por medio del Código Penal, que aun siendo inocente no deja de ser un tema y pesado el recurrir a los abogados para que estén al tanto de las maniobras o disposiciones en su contra.
Y la acosan con tanta vehemencia que dan la impresión de que buscan algo así como un intercambio de rehenes, o sea, la FGR y la UIF se olvida del Comandante Azul y de la UAT, y ellos le dan carpetazo a las acusaciones en contra de la alcaldesa y de Carlos Peña Ortiz.
Se supone que ya había un trato entre el gobernador y alguien del gobierno federal, pero con la súbita detención de un constructor que ya está vinculado a proceso como probable copartícipe de los delitos del gobernador de Tamaulipas, eso hace suponer que si lo hubo, ya no está vigente el acuerdo.
Por tanto, Maki Ortiz ahora paga los platos rotos, y no hay quien pueda asegurar que la 4T va aceptar el intercambio de rehenes políticos pero que ya están dentro de la arena judicial, en donde ya no es fácil desenredar los nudos. Habrá que esperar.
Y hasta la próxima.