Hay muchas razones para decir “thanks” en estos momentos donde florece el pesimismo, cuando pareciera que no hay manera de salir adelante.
En este cuatro jueves de noviembre los gabachos celebran el Thanksgiving, que viene desde 1621 cuando los colonos celebraron el éxito de su primera cosecha y que compartieron pavo, calabazas y Whataburgers (esas no) con los indígenas nativos.
En una época en que todavía Texas era parte de México, en el norte los güeros empezaron una tradición que se ha vuelto más sólida que la propia Navidad.
En la actualidad en las casas de acostumbra compartir la mesa con familiares y amigos no solo pavo con gravy, mac and cheese (macarrones con queso), ejotes, puré de papas, salsa de arándanos, coles de Bruselas, elote desgranado, camote con bombones, crema de maíz o de espinacas, zanahorias caramelizadas, relleno de pan molido, pay de nuez o de blueberry.
Has de cuenta que vas al Luby’s, que por cierto han cerrado varios restaurantes en McAllen desde la pandemia, pero más rico. En algunas casas los maridos hacen varios platillos. No les digo como yo, que puedo hacer unos huevitos con machaca más o menos, asesorado por mi “vieja”.
Por cierto la Rosa María en este día ya se alista para ir en la noche con unos amigos de la border y promete colaborar en la cena. Nomás porque no son platillos de temporada, pero ella se apuntaría con unos chiles en nogada o lengua a la vizcaína. Bien hacendosa y alegre, siempre cante y cante las canciones de Juanga o de Shakira. Mientras no me cante la que le dedicó a Piqué.
Volviendo con este día. No acostumbro cruzar al otro lado en busca de los grandes remates del Black Friday, la gente se queda a dormir afuera de Walmart con tal de comprar una tele plana de 70 pulgadas. Hubieran ido al Buen Fin de City Club, a meses sin intereses y la sacaban rápidito.
Pero es tanta el ansia por el “shopping” que ya preocupa esta práctica que hacen los residentes y ciudadanos de la border.
El pensamiento de “munchos” de los de acá es “por algo me friego el lomo trabajando, por eso gano dinero y en muchos dólares”. Por eso todos andan con autos de último modelo, camionetas BMW, Mercedes, Land Rover, carisísimas pero que pueden usar, total todo mundo anda en esas camionetonas en el Valle de Texas.
Si andan por acá, porque les ganó el ansia del “shopping” hagan una buena obra y no se peleen al ingresar a las tiendas por ser los primeros por entrar a Rose o Marshalls, Target, Burlington, hay para todos y bien.
Vengan a la border. Nadie los va a asaltar aquí en Ta-ta-ta-maulipas, es más fácil que lo hagan en Puebla o en el Estado de México. Sean felices y muchas thanks por darse el tiempo de leer esta humilde columna.