Cuando nos queremos hacer weyes, sí que nos sale naturalito. Como es el caso de los perros y gatos sueltos, esos animalitos callejeros que terminarán de convertir a nuestro rancho en un lugar enfermo, de harta suciedad ambiental, un galopante foco de infección, un cúmulo de enfermedades, el abanico es muy amplio provocado por heces volando.
CACA…Y NO HUATE
El excremento volátil de tanto animal callejero está a la orden del día, en las comisuras de nuestros labios, ante nuestros ojos, o más bien adentro de ellos, la olemos y la comemos, está en las yemas de nuestros dedos. La materia fecal se posa en cualquier superficie que nosotros tocamos. Y como todos nos llevamos las manos a la boca, a los ojos y a la nariz, pues ya estuvo que nos estamos, tragando buena cantidad de mugrero canino o minino.
SOLITA VIENE
Y aunque no fuera por las manos, solita, la caca voladora se nos aterriza ahí en nuestras mucosidades. Claro que el gobierno se hace wey, (el federal, el estatal y el local). Nadie va a hacer nada por los perros. Eso sí, muy buenos para prohibir que sean puestos a dormir, mediante la manera más fácil, rápida y económica de la que se tiene conocimiento. Y que es la de los salvajes y gachos toques, descargas eléctricas a un firuláis mojado o a un micho empapado.
NOS LLEGARÁ LA LUMBRE
Cuando ya tengamos el fuego en los aparejos, entonces alguien se atreverá a levantar la mano y la voz, pidiendo auxilio. Cuando nuestros hijos o nosotros contraigamos enfermedades gachas, como la leptospirosis, entonces sí vamos a ponernos roñosos con la autoridad. Antes los dejaremos que se sigan haciendo weyes por años y años. Y nosotros también.
TODOS DISIMULANDO
Y luego, el gobierno a escondidas empezará a sacrificar a tales animales, pero “sin que se den cuenta” las agrupaciones protectoras de las bestias. Ese será el juego en esta ciudad y en otras del estado. Andar disimulando, baboseando aquí y allá, unos haciéndose weyes (el gobierno) y los otros también (protectores). Porque se llegará el momento insoportable que no se podrá tolerar, el de tanta proliferación de millares de perros mordelones y tumba botes. Iguanas ranas con los gatos.
AUTOS CHOCO KRISPIS
Hay dos tipos de gente en el asunto de los autos chocolates, ese tema que tanto interesa en este momento. La que está a favor -porque los tiene y burla al fisco, para poder moverse en su rancho- y la que no. Esta última es la que tiene los medios o se sacrifica y ocupa en hacerse de un auto en regla, en la inteligencia de que decir “en regla” es tenerlo derecho, pagando impuestos, nada tiene que ver con sangrados mensuales.
CASI CASI
Aunque viéndolo bien, casi casi es lo mismo que sangrar cada mes, eso de tener un auto derecho, pues por poquito nos cuesta líquido hemático el pagar impuestos y cubrir 12 letras al año ante la agencia automotriz. Ya en serio comprendemos a la racita que con 400 cueros de rana se compra una garraleta desechable. Pero los que traen unos trocones groseros bien bañados, nada más porque vivimos en un pueblo sin ley, pues como que por ahí ni va la cosa, eso no es necesidad, sino simple mamfiruleo de las leyes.
POBRE GENTE
Como que este día no le tiraremos leña a los polacos, pues también nos cansamos de tocar a cada rato ese gacho tema. Mejor vamos a tratar temas más sentidos, de los que afectan a pueblo, a la racita buenera. Hey mi racita, pidamos a Dios por una treintena de parroquianos de la iglesia Cristo Rey, que se accidentaron la noche del miércoles allá por San Roberto, entre Saltillo y Matehuala. Iban a la Basílica de Guadalupe. El Señor quiera y no haya pérdidas humanas, pues había ocho viajeros graves.
VAMOS A ORAR
Todos pidamos al Señor por ellos, que ellos iban a pedir por Nuevo Laredo ante el Magnífico. Unámonos en oración, pidamos al Creador por estos paisanos en gravedad y por todos los que tripulaban ese autobús, que hoy están en apuros. Los queremos sanitos, de regreso. Nada nos cuesta, vamos a hacerlo como buenos cristianos que todos se supone somos (Manque bien que conocemos a cada desgraciado con pinta de buena onda y al que todos los dormingos vemos tempranito en misa).
VIERNES SOCIAL
Y para que se nos salga el chamuco, hoy es viernes, de esos como el gran gordo de oro Víctor Hugo Ruiz y su Banda Estudiantil La Conquista, cantaban como; “Viernes social pa´ bailá en Laredo”. Hoy los caballeros vamos a mover el esqueleto. Las damas agitarán el guayín, aunque despierten al chamaco, que de eso se trata.