Al más puro estilo de la nueva mercadotecnia del nuevo milenio, pareciera que los alcaldes y diputados que llegaron a sus cargos mediante la postulación y campañas implementadas por sus partidos de origen, se ofrecen como “mercancía para llevar”, “comida rápida” para MC que se los “lleva puestos”, sin la molestia de tener que prepararlos “en casa.”
….Y así se llevan a los alcaldes y diputados apóstatas a sus filas sin tocar baranda, como si se llevaran a un bebé del Centro Capullos a su “hogar” de un ratito y le ponen su mameluco naranja para la foto., y “para que tengan la oportunidad de ver una mejor vida”…¡Lindos se ven!…o eso es lo que creen. Pero nos dejan una sensación de compasión que se parece más a la lástima. ..bajo la premisa de que “el fin justifica los medios”, Hay que entender que no todo lo moral es legal ni todo lo legal es moral.
En la mercadotecnia política, todo el un producto y todos mercancía. El mensaje es lo de menos. Veremos si además, no resultan “desechables”.
Tal vez sea conveniente que sepan (principalmente los apóstatas) que si se dejan envolver y se los llevan puestos, no se aceptan devoluciones….porque todas las ventas (hasta las de militancia, consciencia e ideología) son definitivas.