“Porque esto es sólo el principio”, emulando al Alcalde diremos que a nuestra gente afectada de Nuevo Lardo, en la reconstrucción de los daños, con motivo de esta venida agua, les espera aún más desdén, grosería y mal trato del gobierno local.
Los nuevolaredenses en sus calles, en su propia cuadra ya vieron que los regidores los insultan hasta con mentadas de madres, sí, en efecto, con rayadas de mamá y calificativos de “pendejos”, entre otros.
Y por si fuera poco, algunos regidores, retan envalentonados (ellos rodeados de asistentes) a los vecinos que se atreven a reclamarles ayuda.
La gente de la ciudad ha sido testigo gracias a los videos, cómo es que el Alcalde les pone cara de fastidio y con tono de mayor molestia les corea: “Ooootra veeez con lo miiiiismo”, cuando la raza le espeta la nula ayuda o a cuentagotas, pero también les encasqueta el no haberles avisado de la magnitud de la llegada de las aguas que destrozaron sus muebles, afectaron a sus viviendas y dañaron sus coches.
TRAGUÉMONOS LA PESTE
La cara no la dio al pueblo, puesto que mientras la gente se parte el lomo, con la escoba y el trapeador, trapos y demás artículos de limpieza, tratando de sacar aguas pestilentes de sus hogares, él, su Alcalde, va volando a Ciudad Victoria a estar presente en un evento en el que francamente no se le requiere, en el que él no hace falta, no es necesario, ni se le toma en cuenta.
Porque la rápida y serpenteante visitadita a una colonia afectada -sacándole la vuelta a la gente furiosa, para solamente charlar con los nobles vecinos más tranquilos- eso no es dar la cara, es una acción vil, no propia de quien es la primera autoridad de la ciudad.
Sólo fue una mofa suya hacia el pueblo, porque “darle el avión” a la gente como se vio en el video del Fovissste, es burlarse de ella.
El poner cara de fastidio a quien está desesperado, triste y molesto porque se quedó sin nada, sólo con lo que trae puesto, es falta de respeto del Alcalde.
Nuevo Laredo está ante un nulo gobierno, incapaz, nefasto, ineficiente, gente que no sabe ni cómo tratar al pueblo dolido, cómo tratar a las familias afectadas, que se quedaron sin refrigerador, sin estufa, lavadora y televisor, aparatos que simplemente ya no sirven.
El Presidente Municipal no supo cómo enfrentar a cientos de padres y madres que ya no tienen camas, ni ropa, ni zapatos, ni los libros y útiles escolares de sus hijos, no después de que metro y medio de agua se adentró en sus casas.
NO SE VALE
Enrique Rivas Cuéllar, les quiere dar una botella de un litro de cloro, a los millares de nuevolaredenses, esos que por siempre tendrán impregnado en sus fosas nasales, el nauseabundo olor de las aguas negras, que tuvieron que sacar de lo más recóndito de sus viviendas.
Una colchoneta y un bote de Pinol, Fabuloso o Cloralex, no es la ayuda que espera nuestra gente, no de un gobierno que no les avisó de la magnitud del fenómeno que se venía, al menos para que rescataran los más de sus muebles y su tan necesario auto familiar.
Ahora, en la reconstrucción de los daños, vamos a ver cómo se comporta el gobierno municipal, pues viernes y sábado ha dejado mucho que desear.
LO HARÁN POLÍTICO
Ya el PAN -no el Alcalde que es quién maneja al partido, no el tesorero quien es el segundo de abordo o secretario de Acción Nacional- anunciaron una brigada de ayuda este mismo sábado.
¿Por qué no el gobierno municipal, por qué dejárselo al partido en el poder? Es más vil aún esta politiquería, cuando que debió haber salido al frente la primera autoridad, tal vez para intentar ganarse -algo que nunca conseguirá- algunas simpatías entre la ciudadanía, después de tantos errores del gobernante y su equipo.
Esto se paga, van a ver que sí.
