La descomposición de los partidos políticos es evidente desde hace años y se refleja con el encarcelamiento de algunos de sus funcionarios o representantes populares que emergieron de sus filas.
Un caso es el de JUAN GENARO DE LA PORTILLA NARVÁEZ, uno de los últimos caciques de Altamira, quien pisó el penal acusado del delito de peculado, aunque la realidad MANUEL CAVAZOS LERMA lo mandó encarcelar por una afrenta personal.
Cuentan que JUAN GENARO en un acto de campaña a la gubernatura de CAVAZOS LERMA en Altamira le jugó una broma muy pesada, pues le pidió a uno de los travestis más famosos del municipio y quien podría pasar fácilmente por una hermosa rubia, que sacara a bailar al candidato.
CAVAZOS aceptó encantando y derrochó talento y gracia en medio de la pista ante las carcajadas de los altamirenses que veían la curiosa escena del candidato bailando casi de cachetito con la supuesta dama.
Con el tiempo, CAVAZOS se cobró la afrenta enviando a la cárcel a JUAN GENARO, cuando era diputado local y perdía el fuero para ser enjuiciado por hacerlo pasar un ridículo.
También cayeron presos LUIS GERARDO HIGAREDA ADAMS y PEDRO HERNÁNDEZ CARRIZALES, ambos acusados de malversación de fondos, pero más que castigar un acto de corrupción, era una venganza política.
Sin embargo en el PRD, las cosas están peor y van desde el encarcelamiento de MIGUEL ÁNGEL ALMARAZ, quien fue su dirigente estatal y candidato a diputado federal quien cayó preso por delitos relacionados con la delincuencia organizada.
También debe recordarse el caso de FRANCISCO CHAVIRA, detenido por el delito de secuestro, para ser liberado un año después.
También cayó preso el ex alcalde de Madero, JORGE MARIO SOSA POHL por el delito de peculado en perjuicio del municipio que gobernó.
La coincidencia es que los tres fueron dirigentes estatales del PRD, con todo y lo que ello significa.
El caso de Iguala, Guerrero donde un alcalde perredista y su esposa ordenaron secuestrar y desaparecer a los estudiantes normalistas de Ayotzinapa, en una entidad que era gobernada por ÁNGEL AGUIRRE que llegó con las siglas del Sol Azteca hablan de su descomposición total.
Esa putrefacción llevo a la renuncia de CUAUHTÉMOC CÁRDENAS SOLORZANO, el gran jefe moral al partido político que fundo.
Se espera una desbandada en el PRD en el país, pues su lucha por la izquierda se perdió al postular y permitir que el organismo cayera en manos de personajes oscuros que no dudan en delinquir para avanzar. En Tamaulipas los ejemplos son claros.
Quizá pronto caerán algunas figuras del PRI en el futuro.
En ese contexto, el presidente ENRIQUE PEÑA NIETO una serie de reformas coyunturales entre los que destaca que podrán intervenir en los municipios donde sus autoridades municipales tengan nexos con miembros de la delincuencia organizada.
Esta iniciativa es para evitar que se repitan casos como los de Iguala, Guerrero.
Sin embargo es el momento de preguntar si este tipo de casos no se viven ya en Tamaulipas, donde alcaldes son señalados por la vox populi.
Lo cierto es que casos como los de ALMARAZ y otros que se conocen no deben repetirse y para ello los propios partidos deberán reflexionar a quienes permiten llegar a sus dirigencia, pero sobre todo a quienes son postulados a los puestos de elección.
Este proceso federal es una excelente oportunidad para que los partidos tomen sus reglas internas y frenen la llegada de personajes que vivan bajo la sombra de la sospecha.
Bueno, por hoy es todo.
Adiós y aguas con los patinazos…
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