Tocata y fuga en re menor por ‘El Chapo’

Segunda fuga en re menor. ¿Cuál ocurrió hace un par de noches?

Fue en el penal de alta seguridad, en donde nadie camina, sólo me refiero a los reos. Si no son con custodios a su alrededor y se guarda -literal- a las seis de la tarde, salir como el aire es un verdadero acto de magia, que por un túnel, que por lo que guste simplemente salió y salió como los grandes: a hombros entre un mudo silencio de los tendidos.

Todos asombrados, mejor dicho quedaron absortos, pudieron constatar que el dinero abre y cierra puertas, ¡las que estas sean!

Sucede como suele suceder, que ya entrados en gasto una fuga más en ee menor sostenido, a nadie molestaría, tanto así, que con el evento “houdinesco” realizado “El Chapo”, este es ya un mito histórico en el relato del acontecer mexicano.

Ya es un verdadero ídolo de quienes guardados están dispuestos a emular. Claro que no tienen los recursos magistrales que el fugado posee, ni los dineros suficientes para apaciguar conciencias y necesidades, pues existe la posibilidad grande o chica, de que se quiera tener al fugado en sitio más seguro y aislado, a quien sabe todo y tal vez con respaldo, sobre los aconteceres nacionales presentes y pasados, más los segundos, para no lastimar a quienes con una expresión de palabra ensuciaría a quienes dicen estar limpios.

A México este suceso lo coloca en el último sitio en cuanto a seguridad nacional se refiere, porque esta fuga pudiese ser la base necesaria para señalar a quienes merecen ser señalados.

Con esto mejorar la seguridad tan imperiosa que requieren los inversionistas, deseosos, ávidos de invertir ante un peso barato y estable.

Estos inversionistas siempre son precedidos por guerras y asonadas en todos los países del mundo, como avisando de lo que son capaces.

Queda muy claro, con esto, que el dinero lo puede todo, desvía conciencias, es decir, todo se puede comprar.

Esa una vez más, es la lección que deja este suceso.