México, D.F.-
Más de medio millón de pesos han pagado los equipos de la Primera División de México, por concepto de tarjetas amarillas y rojas, en apenas seis fechas que lleva el torneo de Clausura 2013.
En el reglamento de sanciones de la Liga para la temporada 2012-2013, se contempla en el capítulo II, artículo 9, que cada amonestación sea sancionada con una multa de 30 a 200 días de salario mínimo vigente en el DF [$ 64.76 diarios].
En el artículo 17 del mismo, se habla que las expulsiones, serán sancionadas con 90 días de salario mínimo.
Es decir, que cada tarjeta amarilla le vale a los jugadores: $1,942.00 y por la roja se pagan: $5,828.00.
Hasta el momento los equipos han pagado un total de $650,747, siendo los Monarcas Morelia los más castigados con 17 tarjetas amarillas y cinco rojas, por lo que ha pagado $62,152.00. Y para Álvaro Dávila, presidente michoacano, éstas han sido bien merecidas.
“Nos las hemos ganado a pulso. Han sido por falta de concentración, falta de disciplina de nuestra parte, por ahí se salva, quizá, alguna de Joel Huiqui, pero fuera de eso han sido nuestra total culpa”, comentó el directivo de forma enérgica.
El segundo equipo más indiciplinado es el León, quien con 18 tarjetas de amonestación y dos de expulsión, ha pagado la cantidad de $46,612.00.
“La disciplina si preocupa, en nuestro club. No culpamos al arbitraje de nada, sentimos que es producto de la desesperación del futbolista por tratar de hacer bien las cosas”, indicó el director deportivo de los leoneses, Rodrigo Fernández.
¿Quién paga las multas…? ¿El club o el futbolista?
Todo depende del caso.
En Cruz Azul, América, León y Morelia, se conoce que la multa la paga el futbolista, si es culpable irrestricto en recibir la tarjeta.
“Se analiza según el caso —confiesa Dávila—. Las jugadas que son producto natural del juego, que son bajo la consideración del árbitro corren a cuenta del club, las otras que son por un codazo o por reclamar airadamente al árbitro las paga, sin más, el jugador”.
La Federación ha manifestado que el dinero recaudado se gasta en proyectos de desarrollo del futbol y en cursos de capacitación para árbitros, aunque los directivos desconocen a ciencia cierta esto.
“No sabemos a donde va a parar ese dinero —mencionó Fernández—. Ojalá que sea para cursos, sobre todo para los árbitros. La Federación en cada jornada se lleva una cantidad importante que sale de los clubes, ojalá se utilice bien”.
La indisciplina, sale cara.
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