México, D.F.-
Qué no le ha pasado al argentino Christian “Chaco” Giménez en estos dos meses y medio. “La verdad es que han sido jodidos”, reconoce el volante de la Máquina del Cruz Azul.
“De todo, de todo”, menciona y en este torneo, acepta, se le ha cargado la mano.
Antes de que iniciara el campeonato, “El Chaco” se operó de la rodilla, con el fin de alejarse de futuras molestias y empezar limpio a jugar.
Pero no fue así.
En un partido de la Copa, torneo que el argentino había utilizado para ponerse en forma, se desgarró y cuando estaba a punto de volver a las canchas, en pleno calentamiento para un juego, se volvió a resentir.
“Fue jodido”.
— ¿Una limpia, no “Chaco”?
“Ya me la hice”, responde divertido Giménez. “Por eso es que pude jugar y quiero seguir jugando”.
Y es que el que haya entrado en contacto con el balón contra el América contó para él “como una bendición. Siempre que entro a la cancha le pido a Dios que me deje salir sano y esta vez fue así”.
“El Chaco” está de regreso justo en el momento en el que el Cruz Azul más lo necesita, porque el equipo es la realidad, apenas pinta en lo que va de torneo.
— ¿Libre de lesiones?
“¿Qué sé yo?. Pero eso sí, tengo que trabajar mucho para ponerme a punto. Estoy en deuda, una gran deuda”.
De 810 minutos disputados en la Liga, Christian Giménez apenas ha jugado 84 de éstos, menos de un partido regular (90).
Y ya ni contar los juegos que se ha perdido de la Copa, en donde La Máquina ya fue eliminada.
“He jugado poco o nada, tengo mucho que pagar”.
El sueño es que ya las dolencias queden atrás. “Es muy lindo jugar sin dolor, siempre lo he dicho. Ojalá no me lesione más y lo más importante, que no me apure [en regresar]”.
Ese fue el principal problema, las ansias por volver a las la canchas, sin estar totalmente recuperado. “Es difícil que la gente te pida y uno no esté bien. Uno quiere jugar, pero es lesión”.
La pierna le dolía, pero le dolía más ver los juegos desde la tribuna. “Fueron dos meses y medio que no la pasé bien. Hoy lo llevo con calma. Cuando uno no está acostumbrado a lesionarse, cree que rápidamente se va a recuperar, y me tocó una jodida; ya no hay que apurarse”.
Contra Jaguares, “Chaco” irá a la banca, listo para el momento en que el técnico Memo Vázquez lo tome en cuenta. “Memo me ha respetado mucho desde que llegó. No tengo algo que reclamar. Me da para adelante, a pesar de las lesiones, él sabrá cuándo utilizarme”.
Cuando entró a la cancha en el juego ante América, los Cementeros lo vitorearon como el salvador y en el aeropuerto es el jugador más reconocido del equipo. “La gente tiene 10 conmigo. Por eso estoy feliz de jugar en Cruz Azul y por eso me siento comprometido, cada vez más, de entregarle un título. Hay que comenzar a sumar”.
Pero antes ¿una limpia no?
“Ya me la hice…”
Discussion about this post