México, D.F.-
Poco más de nueve meses después, el presunto caso de extorsión al goleador Oribe Peralta sigue en curso.
El 16 de abril, el “Cepillo” se presentó ante el juez 69 de lo penal para ratificar su demanda contra las hermanas Mercedes y Natividad Arlem Torres Ricarte, quienes supuestamente le solicitaron 500 mil pesos a cambio de no dar a conocer unas fotografías que lo comprometerían. Ambas están en el penal de Santa Martha Acatitla.
Fueron detenidas mientras Esther Shueke, amiga del jugador del América, les entregaba la mitad de la cantidad originalmente solicitada a cambio de las imágenes.
Desde que se dio a conocer la situación, el seleccionado mexicano ha asegurado que no realizó algún acto ilícito y que las fotografías que poseen las hermanas Torres Ricarte no son de índole sexual. Eso sí, admitió que le causaron temor por ser una figura pública.
El proceso legal, según ha trascendido, continúa en el desahogo de pruebas por ambas partes, ya que la defensa de las acusadas denuncia que existen varias anomalías en lo expuesto por Peralta y Shueke, quien también presentó declaración ante el juez 69.
La diligencia duró alrededor de cuatro horas e incluyó un careo con las acusadas, quienes negaron intentar extorsionar al futbolista, quien integrará a la Selección Mexicana que participará en la Copa de Oro.
Se espera que durante los próximos meses siga el desahogo de pruebas para emitir una resolución en el caso.
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