Los Ángeles, E.U.-
El portero de la selección mexicana de futbol, José de Jesús Corona, dejó de lado la etiqueta de conflictivo a la que le han hecho acreedor y se dedica únicamente a trabajar, ahora con el “Tricolor” y después con Cruz Azul.
“Chuy” Corona es recordado por un altercado en un bar de Guadalajara, el cabezazo al preparador físico de Monarcas Morelia y hace poco fue increpado por la afición de “La Máquina”, hecho que le molestó y respondió.
“Fui a hablar con ellos, claro, no me pareció buena la manera como fueron a reclamar (los seguidores), simplemente fui a hablar, de ahí es más lo que se habla después, pues eso sí me parece mal”, enfatizó.
Al finalizar la práctica del “Tricolor” en la Universidad de California en Los Ángeles, “Chuy” pidió no hacer caso al acto al decir que “no quiero darle más revuelo a esto, va a ser importante que la gente de Administración tome una determinación hacia esto, que no se vuelva a repetir y no pase a mayores”.
Admitió que ha tenido equivocaciones en algunos hechos, pero no es para que siempre intenten culparlo, él sólo se debe a su profesión con la intención de dar siempre buenos resultados.
“En algunas ocasiones me he equivocado y lo he aceptado, pero de eso a que en cualquier incidente que haya me estén culpando de todo, eso sí molesta”, resaltó.
Sobre este llamado al combinado nacional, destacó que se dedica a trabajar para llenarle el ojo al entrenador Miguel Herrera, quien al final determinará si Corona o Guillermo Ochoa jugarán contra Ecuador el sábado.
Sin embargo, es un hecho que cada uno disputará un encuentro, el otro será el martes frente a Paraguay, ambos en suelo estadounidense.
“No nos ha dicho nada, pero sabemos que cada uno va a tener participación en un duelo. Como siempre hay que trabajar y esperar la decisión del técnico”.
Añadió que: “Estoy siendo el mismo trabajador de siempre, buscando estar en la mejor forma, sé que eso es lo único que está de mi parte”.
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