México, D.F. / Marzo 25.-
Dolor y consternación se vivieron hoy entre los asistentes al velorio y sepelio del luchador de la Triple A, Andrés Alejandro Palomeque González, conocido como “Abismo Negro”, quien falleció la madrugada del lunes en Sinaloa.
En el recinto memorial de Villahermosa fueron depositados los restos mortales del luchador, donde familiares y amigos le dieron el último adiós.
Su esposa Blanca Perla García recibió el pésame de luchadores como Octagoncito, Pasión Cristal y Torbellino, así como de jóvenes promesas del pancracio tabasqueño, además de quien lo introdujo en su juventud a este deporte, Efrén Iduarte Castro.
Para el tabasqueño Octagoncito, Abismo Negro deja un legado por levantar en alto el nombre de Tabasco.
Señaló que se enteró del fallecimiento cuando viajaba de Phoenix, Arizona, a Los Angeles, noticia que le consternó.
Por su parte, Pasión Cristal externó que se trata de una gran pérdida para la familia luchística de México y será un ejemplo a seguir por todas las metas que alcanzó.
El promotor de lucha de la Triple A, Carlos Baeza, indicó que Alejandro Palomeque fue un profesional responsable, pues jamás dejó tiradas las funciones en que participaría.
Recordó que antes del lamentable suceso, planeaba realizar una función en el municipio de Comalcalco el 18 de abril, de donde era originario el luchador, en la que Abismo Negro, junto con Conan, enfrentarían a La Parca y Octagón.
Sin embargo, mencionó que tal función podría realizarse en su honor, aunque ya no en Comalcalco, sino en Villahermosa, el próximo 19 de abril.
Añadió que por ser tabasqueño y promotor de la Triple A, esta organización le encomendó encargarse de todos los trámites para la inhumación del luchador.
Por su parte, Efrén Iduarte Castro, refirió que en 1984, Alejandro Palomeque debutó como “Alex Dinamo”, y a los dos años cambió su nombre a “El Samurai” y desde entonces “nos dimos cuenta que tenía casta”.
Mencionó que El Noruego fue su maestro en el pancracio y lo recomendó con Canek y con Los Villanos, quienes lo apoyaron para conquistar al público a nivel nacional.
“Cuando venía a pelear al Palacio de los Deportes, siempre me buscaba, me abrazaba y me daba un beso, lo quería como un hijo y él como un padre. Sabíamos que pondría en alto el nombre de Tabasco y de México”, concluyó.