Monterrey, N.L.-
Uno de los goleadores argentinos con más animadversión en el fútbol mexicano, Martín Palermo, fue homenajeado por Boca Juniors en su regreso a La Bombonera como técnico del Platense.
Durante ese homenaje el “Optimista del Gol”, como es apodado en Argentina, fue vitoreado por toda la afición auriazul, algo que provocó lágrimas en los ojos del histórico goleador.
Hacía nueve años que Palermo no visitaba ese estadio como técnico; un recinto donde también protagonizó una de las polémicas más grandes del fútbol mexicano como jugador, cuando persiguió, encaró y propinó un cabezazo a Adolfo “Bofo” Bautista en los cuartos de final de la Libertadores 2005.
Así inició uno de los momentos más incontrolables de la afición xeneize, tanto así que los árbitros de ese partido decidieron finalizarlo cuando todavía quedaban 15 minutos de juego, sin duda un momento que todos los “bosteros” recuerdan con orgullo.