Cd. de México.-
El diario catalán ARA ha publicado una investigación en la que denuncia a Albert Benaiges, famoso descubridor de talentos del Barcelona, formador de Xavi Hernández y Andrés Iniesta y que trabajó durante el 2014 en el Guadalajara, como abusador sexual de menores.
Esto desató que el viernes pasado se interpusiera una demanda contra él, de parte de varios de sus exalumnos.
Según el diario: “Durante más de 20 años Benaiges repitió abusos y vejaciones a chicos y chicas de diferentes generaciones. Un patrón de conducta que el ARA ha confirmado con cerca de unos 60 testigos. Se masturbó junto a niños de 13 años, miraban películas porno, hubo tocamientos y juegos de carácter sexual. Estas situaciones tuvieron lugar en las duchas de la escuela, en el gimnasio, en su casa y en las colonias que se hacían en Corçà. Unas experiencias que han provocado un “trauma” a un mínimo de cuatro alumnos. En las cenas que estos estudiantes hicieron años después de dejar la escuela el tema siempre salía.
“De vez en cuando miraba internet para ver si salía algo sobre él”, explica una chica. En conversación con el ARA Benaiges niega cualquier tocamiento, pero admite que no volvería a “repetir nada” de lo que hizo durante esa época”.
En el 2014, el español llegó como director de formación de futbol del Guadalajara, en las épocas de Rafael Puente del Río como director deportivo. Después de algunos meses sus “prácticas”, el supervisar muy de cerca a los menores y proponer exámenes íntimos, provocaron quejas de los padres, las cuales llegaron a oídos de Angélica Fuentes, entonces esposa de Jorge Vergara, dueño del Guadalajara, quien de inmediato pidió su salida.
Benaiges, nacido en México, en Guadalajara, pero de padres españoles, cuando fue despedido de Guadalajara pasó por República Dominicana y después por Japón. Era parte del nuevo organigrama del Barcelona, a la llegada de Joan Laporta, hasta que la semana pasada dejó el cargo.
El diario expone de manera explícita varias historias de exalumnos, hombres y mujeres, que hablan de las experiencias vividas con el formador y como tuvieron que callarse con base a manipulación, pues el día de su salida del club, muchos de estos niños lo despidieron llorando.