La clavadista Paola Espinosa no se obsesiona por lograr una medalla en Juegos Olímpicos, pero se visualiza en el podio: “Sé que estoy muy joven y que si no logro esa meta ahora, lo conseguiré en los de Londres 2012”.
La ganadora del Premio Nacional del Deporte del 2007 señaló que el hecho de ser la abanderada de la delegación mexicana no implica una mayor responsabilidad, “pues ésa es la misma para todos los atletas que conformamos este contingente”.
Entrevistada momentos antes de que abordara el avión que la transportaría a Beijing, China, agregó que para todos los atletas que integran esta delegación, el compromiso es fuerte, pues llevan la representación de un país.
Señaló que aún cuando estaba por tomar el vuelo a Beijing, “los nervios que tengo son los que me han pasado un poquito ustedes, pero no por lo que es ir a los Juegos. Tengo muchos deseos de estar allá, pues estoy segura que serán muy espectaculares”.
Acotó que conforme se acerque la fecha en la que le toque competir podría sentir más el nervio previo a entrar en acción y añadió que sin importar lo que suceda, ella disfrutará cada momento que tenga en su estancia en China.
Dijo que el hecho de partir con tanta anticipación a su compromiso le permitirá, tanto a ella como al resto del equipo nacional de clavados, tener la tranquilidad necesaria para concentrarse, descansar y comer correctamente, además de afinar los últimos detalles previos a su debut.
La deportista sudcaliforniana acotó: “Toda mi vida he soñado con ganar una medalla olímpica. Desde que conozco la alberca he pensado mucho en qué tengo que hacer, me he visualizado en el podio y he estado en el podio en esa alberca, lo que te permite tener un panorama mucho más amplio”.
Finalmente, sobre lo que implicaría ganar una medalla en estos Juegos, Espinosa destacó que “subir al podio en este tipo de certámenes es algo que te da mucho orgullo, pero conseguirlo en China —que es la principal potencia de este deporte— es más meritorio”.
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