Peleará Ochoa titularidad con Navarrete

México, D.F. / Julio 24.-
La pesadilla de ser suplente en el Tri podría repetirse para Guillermo Ochoa en el América, donde librará una férrea batalla con Armando Navarrete por hacerse de la titularidad en la portería del América.
Mañana ante el Pachuca en el estadio Hidalgo, el guardameta de 25 años iniciará el Apertura 2010 en la banca, para darle paso al michoacano, según adelantó el técnico americanista, Manuel Lapuente.
“Mañana para Navarrete y el que sigue contra el Manchester (City), puedo adelantar, lo para Memo”, dijo.
Tras su nula participación en el Mundial de Sudáfrica, Ochoa perdió regularidad en su preparación, lo que desembocó en que “no haya trabajado lo suficiente en la pretemporada para iniciar un torneo”; esto, pese a que el estratega de los emplumados sabe de la capacidad de quien ha sido el arquero titular de la escuadra de Coapa en los últimos años.
Pese a ello, su continuidad no está del todo asegurada para el seleccionado nacional en el América porque su técnico admite que Navarrete lo está haciendo bien y “luego ya se verá, quien esté mejor seguirá como portero. Habrá una fuerte competencia entre ambos”.
De entrada, el timonel americanista admitió que a Memo le dolió no ser titular en la Copa del Mundo, puesto que perdió por errores que le costaron goles en contra tanto en el América como en la Selección Nacional y le generó desconfianza por parte de Javier Aguirre, quien prefirió a Óscar Pérez en la portería mexicana durante la justa mundialista de Sudáfrica.
“Estos días le han servido a para rescatar lo que dejó de trabajar en el Mundial, luego ya se fue de vacaciones y no pudo trabajar. Eso es lo que a mí realmente me inquieta, no su estado anímico”, señaló.
Sin embargo, Lapuente dice que Ochoa ya le dio vuelta a la página y, pese a no haber jugado un sólo minuto de la Copa del Mundo, ya superó esa experiencia.
“Le dolió lo del Mundial, pero ya pasó, es un hombre maduro, no es el chamaco que era antes. Sabe lo que tiene y hasta dónde puede llegar”.
Durante este torneo, Ochoa tiene escaso margen de error. No puede volver a cometer pifias como ante Corea del Norte y Puebla el semestre pasado para evitar revivir en el América el calvario que lo sumió en la banca del Tri, donde también dejó parte de su sueño de emigrar al futbol europeo.