El presidente del Necaxa, Marco Antonio de Alba, ratificó este martes su confianza al técnico Salvador Reyes, pero dijo que el equipo debe mejorar para acceder a la liguilla, en lo que fue considerado como una llamada de atención.
“Los resultados tienen que llegar, ya no podemos dejar puntos en el camino, estamos con cuatro puntos menos en relación al torneo pasado, así que con algunos buenos resultados nos podemos meter en la pelea”, indicó.
Tras ratificar su confianza en Reyes y señalar que “se queda todo el torneo”, dijo que han ocurrido circunstancias que escapan de sus manos, como las expulsiones y algunos errores arbitrales.
Por su parte, Salvador Reyes aseguró estar ocupado en mejorar el accionar del equipo.
“Tenemos que checar el funcionamiento del equipo, volver a las bases, no tengo queja del grupo, son muy profesionales, se entregan en cada entrenamiento, las cosas no nos han salido, así es esto y tenemos que seguir trabajando; lo más fácil sería bajar la cabeza o aventar la toalla pero no, nosotros vamos a seguir trabajando como lo hemos hecho siempre, con mucha honestidad y a tope”, señaló.
Reconoció que el Necaxa está “en un momento complicado” y que ligó dos derrotas consecutivas, pero expresó su confianza en que se revierta esta situación.
Gerardo Galindo, capitán del equipo, dijo que aceptaba las críticas y consideró que son por la propia exigencia que implica jugar en el Necaxa.
“No nos han salido las cosas como todos queremos y tenemos que aceptar los comentarios adversos porque nos van a servir para mejorar”, indicó.
Sin embargo, dijo que los jugadores tienen que cerrar filas, “ser sólidos en el plantel, con el cuerpo técnico y con la directiva, vamos a sacar esto adelante porque sabemos de nuestra capacidad”.
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