Pocos aficionados de Tigres festejan subcampeonato

FOTOS: MARIEL SÁNCHEZ

MONTERREY, N.L.- Se pensaría que la afición felina estaría triste, devastada, molesta, pero aunque hubo lágrimas de coraje, terminaron por aplaudir gustosos, el esfuerzo de su equipo.

Las porras y cánticos se intensificaron y para muchos, Tigres fue el campeón, así lo mencionaron algunos auriazules. Sin embargo cayó por 3-0 ante las Águilas del América en el Estadio Azteca.

Otros por el contrario, decían que sabían perder y que a pesar de la derrota estaban con los felinos, “en las buenas y en las malas”.

Después de terminado el encuentro, la porra auriazul, algunos “libres y lokos” como familias felinas que se encontraban al interior del Parque, recorrieron las instalaciones cantando.

Pero ya eran las 22:00 horas, tiempo de cierre de Fundidora, la afición fue retirada, pero con alegría, por al menos haber llegado a la Final de la Apertura 2014.

CRONICA DEL ENCUENTRO
Eran las 16:00 horas del domingo, la ciudad de Monterrey ya se pintaba de amarillo y azul.

Los aficionados auriazules, lucían uniformados, cada quien se dirigía a diferente rumbo, pero con sólo una cosa en la mente: Tigres saldría campeón ante el América.

Subidos en autos, caminando o en el transporte público, las personas lucían uniformadas y sus rostros sólo mostraban emoción.

A temprana hora, el Metro ya lucía abarrotado y muchos de los usuarios se dirigían al mismo destino: estación “Fundidora”.

Una afición segura del triunfo de su equipo, se comenzó a instalar en el Parque Fundidora para presenciar el partido, y así, celebrar al final el triunfo felino.

Pero no sólo la afición de la “U” esperaba el campeonato, pues algunos albiazules se sumaron al apoyo del equipo regiomontano.

A las 18:00 horas iniciaba el encuentro entre Tigres y América, el equipo felino tenía la ventaja de un gol del partido de ida. El árbitro Paul Delgadillo silbó para que iniciara el encuentro.

Ambos equipos estaban dando una buena final, aunque hubo muchas llegadas por parte de las Águilas en los primeros minutos, la afición apoyaba desde el Parque Fundidora.

“Olé olé olé, olé olé olé oh la, cada día te quiero más… Yooo, soy de Tigres, un sentimiento que no puedo parar”, cantaba la afición.

Con cánticos, porras y gritos, no cesaban de alentar a su equipo, pues ya saboreaban su cuarta estrella.

El equipo comenzaba a desesperarse pues al minuto 36’ Michael Arroyo abrió el marcador con un izquierdazo que Nahuel Guzmán no logro atajar.

Cayó el segundo gol del América al minuto 61’, por parte de Pablo Aguilar, pero los auriazules, no dejaban de cantar, mostraban fe en su equipo.

Desafortunadamente, eso no fue suficiente, el equipo se derrumbó y tras una serie de errores, expulsaron a Darío Burbano, Damián Álvarez y al portero, Nahuel Guzmán en menos de 10 minutos.

Con ocho hombres en el campo, parecía difícil alcanzar al rival, más no imposible, ya corría el minuto 73 y Oribe Peralta se encargo de matar las ilusiones de miles de aficionados al marcar el 3-0 que definió el cierre del juego.

Con esto, las Águilas del América se convirtió en el equipo con mayor número de títulos ganados al llegar y 12 y Tigres, dejó ir su cuarta estrella.