San Salvador, El Salvador / Junio 5.-
Con todo y el dispositivo de seguridad que se desplegó en el Aeropuerto Internacional de Comalapa, los aficionados salvadoreños se manifestaron ahí, con banderas de su país, con cubreboca, con máscaras de oxígeno, y con múltiples consignas para ejercer presión desde el primer instante en que la Selección de México tocó tierra en San Salvador.
“Infectados”; “Vienen a El Salvador a dejar su virus”, fueron algunos de los gritos de la Barra Turboazul, que acudió a la terminal aérea con un nutrido grupo de sus integrantes para molestar a los mexicanos.
Por eso, aunque los futbolistas tuvieron un recorrido cómodo que los mantuvo al margen de pasar cerca de los seguidores centroamericanos, aún desde lejos la gritería se hacía sentir. Y el blanco favorito fue precisamente Cuauhtémoc, a quien dedicaron varias consignas.
Pero El Temo, instalado en la parte de atrás del autobús, abría la ventana de vez en vez para peinarse, despreocupado.
El autobús que trasladó al equipo azteca hasta el hotel de concentración fue escoltado rigurosamente por dos patrullas, las cuales evitaron cualquier tipo de rebase, que intentaron tanto vehículos de medios informativos, como de los referidos seguidores.
Esto generó una larguísima caravana a lo largo de la carretera, en la que se vieron banderas ondeando afuera de los vehículos, y hasta fotógrafos y camarógrafos intrépidos trepados en camionetas pick up, exponiéndose a un accidente por las maniobras de unos y otros.
En la parte de adelante, dos motopatrullas abrían camino al autobús. Y a lo largo del trayecto, los aficionados con sus banderas, dedicados a meter esa presión de la que tanto se habla.
Ya en el interior del hotel, el zaguero Aarón Galindo llamó a los aficionados a disfrutar del encuentro como lo que es, un partido de futbol y no la guerra. “Es un partido de futbol que se vive con gran pasión, por tratarse de eliminatorias, pero al final es un partido de futbol”, expresó.
“Esto es un juego, importante para los dos equipos, pero se queda en un simple juego, esperemos que no pase más allá”, agregó, por su parte, Gerardo Torrado.
Y, finalmente, Pável Pardo remató: “Ellos van a defender a su país y nosotros al nuestro; pero hay que hacer un llamado a la no violencia”.
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