Luego de seis Juegos Paralímpicos con otras tantas medallas a cuestas, el deportista mexicano Saúl Mendoza buscará poner punto final a su carrera en Beijing 2008 con la obtención de una presea que sirva, literalmente, como broche de oro.
Para ello, dijo, se preparó de forma especial, con un recorrido semanal de 200 kilómetros desde el pasado mes de noviembre con miras a participar en las pruebas de 800 metros, 1,500 metros y 5,000 metros en la categoría T-54 sobre silla de ruedas.
“Puse una especial atención en el entrenamiento para los Juegos de Beijing. Participé en algunas pruebas como los maratones de Los Ángeles y de París, así como algunas pruebas en Estados Unidos y Europa porque quiero llegar en mi mejor forma”, comentó el deportista mexicano, en declaración que reprodujo el portal electrónico de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade).
Mendoza dijo que buscará cerrar con un buen logro en Beijing. “Me encantaría (subir al podio) sería algo magnífico porque para ello me he preparado. Ya tengo muchos kilómetros y eso me da confianza para aspirar a lo que todos los deportistas queremos en una justa como los Paralímpicos”.
El mexicano se presentó con la delegación nacional durante la ceremonia de izamiento de bandera, realizada hoy en la plaza de la Villa Paralímpica en Beijing.
Al hablar de su retiro, el fondista mexicano dijo: “Siempre es importante llegar motivado para dar lo mejor en cada competencia. Soy muy afortunado porque he tenido la oportunidad de terminar en el podio en cada uno de los Juegos Paralímpicos que he participado”.
Recordó que en su paso ha contado con dos medallas en Juegos Olímpicos en pruebas de exhibición, así como seis preseas paralímpicas “y todavía con el sueño de estar en el podio en estos juegos, con la esperanza de terminar entre los mejores del mundo”, concluyó.
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