Enero 15
La duda fue esclarecida a manera de un reporte del portal de ESPN. Mark Sánchez va a la NFL.
Apenas dos semanas después de brillar en el Tazón de las Rosas, donde fue seleccionado como Jugador Más Valioso, el quarterback de origen mexicano de los Troyanos del Sur de California optará por probar suerte en el draft de abril próximo.
Citando fuentes allegadas al pasador, ESPN señala que Sánchez introducirá su papeleo este jueves, fecha límite para que jugadores que no hayan terminado su elegibilidad colegial se inscriban en el draft.
Sin embargo, Nick Sánchez, padre del joven de 22 años, señaló al mismo portal de internet que su hijo aún deshoja la margarita entre volver a su último año en USC o ingresar al profesionalismo.
“Mark se ha inclinado hacia ambos lados, pero sigue indeciso”, señaló el progenitor de “El Mexicano”.
La decisión final, según Nick, no será tomada hasta que su hijo platique con el coach de USC, Pete Carroll, quien viajaba de Hawaii a Los Ángeles ayer en la tarde.
“Mark está esperando a que el Coach Carroll regrese de Hawaii, lo que hará esta noche (anoche)”, señaló el bombero de profesión. “Mark no quiere hacer nada sin el Coach Carroll”.
El resultado de esa conversación, y por lo tanto, la decisión final del pasador californiano, no se conocerán hasta hoy al mediodía, cuando Sánchez aparezca en una conferencia de prensa programada en el campus de la universidad.
La oficina de prensa de los Troyanos no tiene un comentario oficial con respecto a este reporte.
El coach Carroll tratará de convencer a Sánchez de permanecer en USC para su último año y segundo como pasador de la potente ofensiva de los Troyanos.
“Tuvo un juego tan grandioso como el de cualquier pasador que haya pasado por esta universidad”, comentó Carroll después del Rose Bowl, en el que Sánchez ganó 413 yardas al completar 28 de 35 envíos, cuatro de ellos de anotación. Agregó un touchdown por la vía terrestre.
“No hay duda de que es capaz de ser el mejor jugador de la nación si es que decide quedarse un año más”, agregó el ex entrenador de los Jets de Nueva York.
Sin embargo, la decisión de Mark de probar suerte en el próximo reclutamiento colegial, bien pudiera estar influenciada por terceras personas.
Sam Bradford, ganador del Trofeo Heisman con la Universidad de Oklahoma, y Tim Tebow, pasador de los campeones nacionales de Florida, han anunciado que volverán a sus respectivos colegios la próxima campaña.
Con tales anuncios, los reflectores recaerían sobre estos dos pasadores que disputaron el título colegial la semana pasada y que acapararon dos de los tres primeros lugares al Heisman, dejándole poco espacio al nieto de mexicanos para levantar sus bonos de cara al próximo año.
A su vez, sin Tebow y Bradford, el mercado de quarterbacks en el draft de abril se reduce considerablemente, dejando a Matthew Stafford (Georgia) como la única clara competencia para llenarle el ojo a los equipos de la NFL.
Postores debe haber muchos, pues hay varios equipos que flaquean en la posición de pasador, y que pudieran estar interesados en alguien del talento de Sánchez (34 anotaciones, 10 intercepciones), en especial considerando el linaje de USC que recientemente le ha dado a la liga a jugadores de la talla de Carson Palmer y Matt Leinart.
Equipos en reconstrucción como Detroit, San Francisco, Kansas City, Buffalo y San Luis, bien pudieran fijar los ojos en el descendiente de migrantes de Jalisco y Zacatecas.
Mientras que escuadras con más talento, pero con dudas en la posición como los Jets, Minnesota y Chicago bien pudieran ver en Sánchez a la pieza faltante para dar el siguiente paso.
Cualquiera de ellos podría empezar a hacer planes desde el mediodía, o esperar un año más.
De someter los papeles a la NFL, tendría cuatro días para cambiar de opinión a menos que entre en contacto con algún agente.