Zizinho saboreó la medalla, aunque fuera ante sus paisanos

Londres, Ing.-
De todos los padres que presenciaron cómo sus hijos se volvieron campeones olímpicos, hay uno que lo disfrutó sin igual por los lazos sanguíneos que lo rodeaban. Por un lado, uno de su sangre lo dio todo en Londres 2012, y por el otro, fue ante los suyos. Los que también nacieron en su misma patria. Se trata de Francisco dos Santos, el papá de Giovani dos Santos.
“Cuando vi a Giovani con la medalla, recordé de todo. Desde que nacieron mis hijos siempre tuve el deseo de que fueran futbolistas. Como papá, siempre quise que llegara a lo más alto, que fuera un triunfador en todo. Mi sueño fue que triunfaran y salieran adelante. Cuando lo veía cómo trataba el balón y cómo jugaba, ahí me di cuenta de que tenía todo para salir adelante en el futbol profesional. Sabía que iba a ser un ganador”, compartió Dos Santos.
Mejor conocido como Zizinho, un mexicano-brasileño, vivió de modo especial una final entre sus dos patrias. Pero, enfatiza, él es tricolor. Es uno más de esta nación por el hecho de tener a un hijo defendiendo la playera de su selección. No importa que para Brasil representara una oportunidad de ganar el único certamen de futbol que les falta en su largo palmarés. Es más, ahora el sueño es ver a Giovani campeón del próximo Mundial.
“Con la medalla estoy feliz. Fue el mejor regalo que le dio a la familia. Estamos contentos por México, pues es la medalla que todo mundo esperaba y más contra Brasil [risas]. Si Dios quiere, ahora quiero verlo campeón del mundo con Jonathan, juntos los dos. Ese es mi sueño. Y si es de nuevo contra Brasil y en su Mundial de 2014, mucho mejor. Hay que festejar en Brasil [risas]”, agrega el orgulloso padre mexicano por elección, brasileño por nacimiento.
El ex futbolista es uno de los muchos familares que acompañan a los guerreros tricolores en el día más importante de sus carreras deportivas. También están los de Diego Reyes, Oribe Peralta, Marco Fabián, Dárvin Chávez, Héctor Herrera, Raúl Jiménez y hasta los de Luis Fernando Tena. Todos gozan con los dos tantos del “Cepillo”… Y sufren cuando Hulk intenta revivir a Brasil.
Dramático final a una dulce historia, lo que explica que el “Flaco” se abrace con su familia en cuanto puede acercársele. “Las palabras no salen en esos momentos, pero todos sabemos lo que sentimos”.