Recife, Brasil.-
La adrenalina por marcar su primer gol en Copas del Mundo no provocó amnesia en Andrés Guardado. Su orgullo estaba tan lastimado que dedicó algunos minutos de la víspera para preparar el festejo si le tocaba estremecer las redes croatas.
Y el destino quiso que cobrara revancha.
Eso explicó la peculiar celebración tras correr desenfrenado hacia una banda y enviar besos a sus seres queridos, esos que desbordaban orgullo desde la tribuna de la Arena Pernambuco.
Inundado por el éxtasis, “El Principito” empezó a mover ambas piernas de manera incesante. Sí, era con dedicatoria al hombre que le observaba, desolado, desde la zona técnica del adversario.
Al tres veces mundialista le dolió que Niko Kovac, director técnico de Croacia, asegurara que a Miguel Herrera y sus 23 elegidos les “temblaran las rodillas” de cara al choque de este lunes.
Orgulloso, el zurdo relata que su festejo fue “con las dos. Hice como si temblaran las piernas, pero no me tiembla nada”.
“No es burla”, complementa, con picardía. “Simplemente, (quise) demostrar que a los mexicanos no nos tiemblan las piernas para jugar este tipo de partidos”.
El discurso de los europeos remasterizó el temple de una Selección que comienza a habituarse a las adversidades.
La tarde del domingo, de camino al estadio, se enteraron de lo dicho por Kovac y Luka Modric, volante del Real Madrid, a través de las redes sociales. Hicieron el pacto de no contestar antes del silbatazo final. Anhelaban callarlos con buen futbol y, entonces sí, mostrar que ellos también pueden ser duros con la voz.
“Cuando aspiras a cosas grandes y quieres pelear por lo más alto, tienes que luchar contra todo lo que viene en el camino”, recuerda Miguel Layún. “Lo más importante es que el equipo no baja la cabeza y sigue luchando”.
Además de que no se interna en polémicas estériles, más allá del eterno espíritu combativo del “Piojo”.
Pese a que disfrutaron la lección al adversario que han dejado en el camino y creen fervientemente en sus posibilidades, los futbolistas mexicanos aseguran que no caerán en los brazos de la soberbia.
“Tampoco vamos ahora en plan agrandado”, advierte Guardado. “Ya vimos a los que hablaron antes y mira lo que les pasó”.
“Este equipo nunca hablará de más. Nos hemos propuesto es no engancharnos con ese tipo de cosas”, añade el meta Guillermo Ochoa.
Discussion about this post