México, D.F. / Oct. 31
Son canciones de José Alfredo Jiménez que viajan en trajinera a más de 12 metros de altura.
Penden de unos cables de acero que soportan los esqueletos de 35 de esos vehículos acuáticos y con los que se conmemorará el 35 aniversario luctuoso de este emblemático compositor mexicano que falleciera un 23 de noviembre de 1973.
“Muchas de sus canciones han viajado en trajinera”, expresó la artista plástica Betsabeé Romero, quien ideó la instalación “Amaneció otra vez”, que será inaugurada el sábado en el vestíbulo del Auditorio Nacional.
Recubiertas con tela de varios colores y adornadas con flores, Romero ideó prenderlas como “farolitos”, pero las características del espacio tuvo que adecuarlas y sólo “volarán”.
“El último trago”, “Serenata huasteca”, “Ella”, “Amanecí en tus brazos”, “El Jinete”, entre otras canciones son las que irán en trajineras, que será la mezcla entre el homenaje y un altar de muertos.
Para Betsabeé Romero, José Alfredo tuvo la capacidad de comunicarse con los sentimientos más profundos como el dolor, la perdida, “el estar ardido” y contento. “No todos pueden conectarse con los sentimientos profundos que es lo que buscan muchos artistas”.
Emplea las trajineras porque es el vehículo que representa la festividad, el disfrute de la comida y los amigos, y que retoma José Alfredo en sus letras.
De los altares de muertos, señala que son instalaciones efímeras, cotidianas, con mucha generosidad y valores.
Esta es una de las instalaciones que se pueden leer y cada persona podrá tener sus propias referencias viendo los nombres de las canciones, “me interesa que haya ese conecte personal e íntimo con las piezas por parte del público”.
Romero propuso que se instale un karaoke en una de las pantallas afuera del auditorio, pero aún no se confirma.
Por otra parte, la artista plástica presenta actualmente la exposición titulada “Lágrimas negras” en el Museo Amparo de la ciudad de Puebla, la cual hace referencia a la polémica reforma energética.
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