México, D.F. / Mayo 27.-
La cantante mexicana Julieta Venegas ofreció el último de sus conciertos antes de tomar un descanso debido a su embarazo, en un exitoso espectáculo en el teatro Metropólitan, que lució a su máxima capacidad.
Previo a la aparición de la artista, la española La Bien Querida se encargó de abrir el recital, cuya actuación fue accidentada al presentar ciertas dificultades con la interpretación de sus temas, casi al finalizar su repertorio.
A las 21:17 horas, Venegas salió al escenario, con un vestido negro con el que lucía su vientre de seis meses de embarazo. El júbilo de los tres mil asistentes no se hizo esperar con los primeros éxitos de la noche: “Amores platónicos”, “Limón y sal” y “Bien o mal”, el cual es el primer sencillo de su reciente álbum “Otra cosa”.
Al igual que en sus anteriores espectáculos, la tijuanense prescindió del acordeón que la caracteriza, para evitar complicaciones en su gestación debido al peso del instrumento, el cual fue tocado por uno de sus músicos.
Más adelante, la ganadora de cuatro Grammy Latinos siguió la velada con “Algo está cambiando”, “Despedida”, “Algún día” y “Debajo de mi lengua”, otra de las canciones incluidas en el álbum producido por ella en colaboración con Óscar “Cachorro” López.
Con los acordes de piano, Julieta interpretó “Lento” y posteriormente “Ya conocerán”, “Eterno” y “Un lugar”, temas con los que es reconocida como una de las artistas más premiadas y respetadas en el ámbito de la música.
Para interpretar “Amores perros” la intérprete invitó al escenario a Quique Rangel, bajista de Café Tacvba, y continuó su repertorio con “Sería feliz” y “Me voy”, los cuales fueron coreados de principio a fin.
El recorrido musical siguió con “Duda”, “Original” y “Eres para mí”, que la cantante dedicó a su público, a quien agradeció su presencia en el recinto capitalino, luego de la gran aceptación de la gente, que incluso se paró de sus asientos para seguir el ritmo del tema.
Previo a su interpretación de “Revolución” Venegas recordó al argentino Gustavo Cerati, a quien le deseó una pronta recuperación al considerarlo uno de los músicos más talentosos y un gran ser humano. La respuesta fue una ovación colectiva de los espectadores.
Después de cantar “El presente”, Julieta abandonó momentáneamente el escenario; sin embargo, ante la petición insistente de “¡otra, otra!”, volvió con “De mis pasos” y “Andar conmigo”, para finalmente cerrar el concierto.
De esta forma la cantautora se despidió de sus fanáticos, quienes la ovacionaron de pie, en su última aparición en los escenarios antes de dedicarse de lleno a su próxima maternidad.
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