Ciudad de México.-
En 40 días en el hospital, a causa de un problema en el hígado, pasan muchas cosas por la cabeza, muchos temores. Sí, morir es una de ellas. Pero “de vuelta a la vida”, Daniel Bisogno dice disfrutar más cada día que transcurre.
“Estuve la mitad del tiempo intubado e inconsciente; haber librado todo eso ya me tranquiliza”, expresa en entrevista con EL UNIVERSAL.
El conductor habla minutos antes de entrar al aire, como desde hace 27 años, en el programa de espectáculos “Ventaneando”. Cuenta que se encuentra comiendo de todo con el objeto de recuperar los kilos perdidos durante estos meses debido a su padecimiento de hígado graso.
“Estoy muy bajo de peso y eso que ya subí seis kilos, le estoy pegando hasta al Gansito, a absolutamente todo”, indica.
Ahora, Daniel se prepara para un trasplante de hígado, procedimiento quirúrgico que ya le fue explicado por los doctores; él dice estar listo para esta operación.
“Uno oye la palabra e inmediatamente te espantas, cuando me lo dijeron casi me muero del terror, pero después fui entendiendo; el doctor que me va a operar hace tres operaciones de este tipo diarias. He estado más tranquilo y ya estoy en una lista en la que tienes que pasar varias pruebas para poder estar.
“Estoy esperando a que me avisen que ya se tiene este órgano, en mi caso es más sencillo que en otros, por mi tamaño, ahora sí que me cabe cualquiera, y mi tipo de sangre es la más común”.
Una gran razón para luchar
Esta oportunidad para vivir la toma como una para recomenzar y valorar más la vida pues, además, en su cuarentena obligada falleció su madre Araceli, pero en la Tierra le queda su pequeña hija Michaela, quien espera por él.
“Ahora valoro más la vida, quiero estar con mi niña, que tiene ocho años; quiero que esté todo bien y además todavía estoy joven para luchar”.
Bisogno cuenta que la principal motivación que tiene en estos momentos complicados es el humor, pues considera que puede ayudar a su recuperación.
“Hay que estar feliz siempre, no me puedo traicionar a mí mismo con malos pensamientos, tengo la mejor de las actitudes y estoy listo para hacer esto.
“Siempre he tenido miedo de morir las tres veces que he ingresado al hospital, pero me gustaría que la gente me recuerde con una sonrisa, siempre he trabajado para eso, para poder trascender como una persona que luchó por divertir a su público”, enfatiza.
Por esta razón, él se dice entrenado ante la presión mediática con la que vive constantemente, como la invasión a su privacidad y la difusión inexacta de ciertos hechos.
“A mí me agarran saña, pero yo digo la verdad tal cual es, nada más que lo hago en mi programa y en medios serios que tienen respaldo de años, con una credibilidad importante, como ustedes”, externa el también actor de obras como “El Tenorio cómico”.
Al estar en el ojo público desde hace años, Daniel es consciente de que no puede establecer límites entre su vida personal y laboral como él quisiera, por lo que advierte que procederá a demandar cualquier difamación hacia su persona.
“De repente inventan una cantidad de cosas tremendas, por eso vamos a hacer una demanda que estamos preparando a un medio que ha sido muy sanguinario sin ninguna explicación”, dice.
27 años de ventanear
Teatro. Daniel inició su carrera sobre las tablas, gracias a la influencia de su prima, Angélica Vale; es egresado del CEA de Televisa.
Ventaneando. Ingresó al programa de espectáculos en 1997, después de un breve periodo en la radio.
Vuelta al teatro. Desde 2022 formó parte de “Lagunilla mi barrio”, al lado de Maribel Guardia, Ariel Miramontes, Violeta Isfel, Lisardo y Freddy Ortega.