México, D.F.-
Un hombre puede perdonarle todo a la actriz Marjorie de Sousa, no así un colega y menos si ésta es mujer, tal como la cubana Raquel Bigorra, quien quedó muy irritada con la impuntualidad de la afamada venezolana.
Según da a conocer el portal labotana.com, la rubia llegó con dos horas de retraso a una cita que tenía con Raquel.
Y es que las dos fueron contratadas en pasados días para inaugurar en Querétaro una tienda de ropa, pero Marjorie llegó dos horas tarde a la cita que tenían para irse juntas a la vecina ciudad.
Tal fue la preocupación de Raquel que, dicen, tuvo cefalea debido al estrés que le provocó el retraso de la impuntual actriz.
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