México, D.F.-
La noche del viernes, el Auditorio Nacional de la ciudad de México se llenó de botas y sombreros. Así vestía la mayoría del público que aistió al conierto de Jenni Rivera, mejor conocida como “La diva de la banda” y que se presentó en un video proyectado antes del show como “La reina de un lugar donde los hombres mandan, la mujer valiente y con carácter, y a la que sólo su gente conoce”.
Inició así un concierto en el que las indirectas, las lágrimas y los niños fueron los protagonistas.
Veinte minutos antes de las nueve de la noche, apareció en el escenario la intérprete originaria de Long Beach California acompañada de su banda. Comenzó con temas como “La chacalosa”, “Mi vida loca” y “Los chuper amigos”.
La intérprete de “Ni me va ni me viene”, contaba con una mesa y un espejo de cuerpo completo en un costado del escenario, donde había agua, té y una botella de tequila, para cantar este tema acudió a dicho lugar, bebió tequila y al finalizar, con un ademán simuló una bateada de beisbol.
Comenzó así a enviar una serie de mensajes dirigidos a su ex esposo, jugador de beisbol a quien se refiere como “El pelón”. “¿Cuánto te debo?”, fue otra de las canciones con las que la también conocida como gran señora, hizo alusión a su situación actual de divorcio, pues al concluirla afirmó: “¡Cuanto te robaste cabrón!, A mí me sobra con qué pagar”, causando euforia en sus admiradores.
Mujeres, hombres y niños se encontraban de pie interpretando al par de su ídolo canciones como “Tu camisa puesta”, “Culpable o inocente”, “No me pregunten por él”, “Detrás de mi ventana”, “Mudanzas” y “De contrabando” jugando con la letra de ésta última, la diva comentó tener “antojo” por un hombre y afirmó “Al fin que ya puedo”.
La gente no se cansaba de expresarle admiración y cariño a la cantante, a lo que Jenni contestó: “Gracias porque ustedes me siguen queriendo así, como soy, y porque no me dejan sola, me levantan”.
A pesar de estar lastimada de la garganta, Jenni ofreció un extenso espectáculo, y sobrellevó el inconveniente con humor.
“Otros artistas no harían esto, pero como yo no soy artista, a mí nomás me pagan por cantar, si ustedes me lo permiten, haré gárgaras de tequila, ¿Las quieren oír?”.
Y sin más preámbulo tomó su coma, le dio un trago y con el micrófono en mano lo llevó a cabo. Una vez realizada su improvisada curación, llamó al escenario a “Ricardito”, uno de sus asesorados en el reality show de Televisa La voz México, quien cantó “El final de nuestra historia” de la arrolladora banda el limón.
Minutos más tarde, las luces se apagaron, y al encenderse estaba en medio del escenario Jenni Rivera enfundada en un vestido largo color plateado estilo charro, y un rebozo verde bandera, acompañada ahora de mariachis interpretó “Como tu mujer” de Rocío Dúrcal, “Tu profesor”, y “Ni princesa ni esclava”.
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