México, D.F. / Junio 9.-
La cantante Lady Gaga se ha convertido en una de las nuevas referencias en el mundo de la música, los videoclips… y de la moda.
En diferentes momentos de su carrera, en premiaciones, presentaciones, videos e, incluso, en la calle, esta provocadora chica ha encontrado eco en la juventud de su forma estrafalaria de vestir.
Como pocas veces ha sucedido en la historia de la música, los diseñadores más afamados buscan a esta cantante, cuyos modelitos son parte fundamental de sus canciones llenas de acordes estrambóticos, dance, electrónicos y futuristas.
Por ello, nombres como Giorgio Armani, que le diseñó en exclusiva el vestuario de su actuación en el programa American Idol, y el ya fallecido Alexander McQueen, Josep Font y José Castro.
Este fenómeno ya había sucedido, y le pasó a Madonna, quien era la consentida de Jean Paul Galtier.
La dramática y teatral cantante usa lo mismo sombreros gigantes, peinados imposibles, capas, joyas, mallas, chamarras, plumas, chaquiras, corsés, gafas inauditas, maquillaje para convertirse en bruja malévola; emperatriz intergaláctica y dominatrix.
Ha causado tanto revuelo desde su aparición en el medio musical que el diario Daily Mail la comparó con la “Bruja mala del oeste” de la cinta “El Mago de Oz”.
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