Operation Finale, 2018
Basada en eventos reales, esta historia cuenta la cacería de Adolph Eichmann, uno de los más sanguinarios oficiales de Hitler, que llevó al crematorio a millones de judíos.
Son los años 60 en Argentina. Los rastreadores de los nazis que escaparon a los juicios posteriores a la Segunda Guerra Mundial, han localizado a este hombre que ha cambiado de personalidad y vive apaciblemente. La misión los agentes secretos del Mossad es capturar al monstruo vivo, para que sea juzgado en Israel y apague la sed de venganza de todo el pueblo, que durante años ha reclamado justicia.
Localizarlo y echarle el guante es la parte fácil. Lo complicado es extraerlo del país.
Oscar Isaac, como el líder del equipo, y Ben Kingsley, como el veterano nazi, conforman este gran duelo de actuación dentro de una trama de intriga y suspenso, que está llena de imprevistos. La tensa investigación se mueve lentamente, lo que provoca crispación en el grupo que debe ser muy cuidadoso para no delatar su propio juego de elementos encubiertos, que se juegan la vida buscando ajustar cuentas con la historia.
Aunque Isaac lleva la acción, la película se la lleva completa Kingsley. Ya se conoce que es un gran maestro en la perfecta transfiguración. Aquí es asombrosa la apropiación que hace de Eichmann, mostrándolo como un gentil hombre de familia, extremadamente inteligente, intuitivo y diabólicamente manipulador.
Operación Final es una interesante cinta sobre el siempre atractivo tema de los nazis, las atrocidades que hicieron y los esfuerzos que ha hecho la humanidad, a lo largo de décadas, para buscar que paguen por el dolor que provocaron a la humanidad.
(PG-13. Orientación de los padres a menores de 13 años)
Netflix
