Estados Unidos / Mayo 6.-
La belleza se da en todos los colores y no importan nacionalidades, aunque Playboy acaba de dar un gran salto en sus anaqueles de la historia al nombrar por primera ocasión, en su larga vida, a una diosa africana como Playmate del Año.
Nacida en Tanzania, Ida Ljungqvist se ha ganado un hueco de honor en la hemeroteca de la famosa publicación para caballeros. De madre tanzana y padre sueco, esta modelo de curvas infinitas, labios gruesos, mirada dulce y pechos contundentes se dio a conocer al mundo en la edición de marzo de 2008 de la famosa revista de Hugh Hefner.
Y es en este 2009, luego de un cuidadoso análisis, el magazine decidió otorgarle el máximo galardón de las conejitas.
El nombramiento fue como para hacer un cuento de hadas erótico. Ida acudió a la fiesta de celebración de las bodas de oro de la revista, que por primera vez no se celebró en la famosa mansión del magnate del erotismo, sino que fue trasladada al gran salón del Sin City’s Palms Place Hotel & Resort, en Florida.
A la fiesta acudieron numerosas playmates de los últimos 50 años, lo que provocó la emoción del mismísimo Hefner, que se reservó la gran sorpresa de la noche para el final: el nombramiento de la primera playmate del año nacida en el continente africano.
A sus 27 años, Ida, que ha vivido en medio mundo debido al trabajo de su padre en Unicef, reconoció “ser vegetariana y no hacer demasiado ejercicio”, más allá del de pasear a su perrito chihuahua, aparte de sorprender a propios y extraños al asegurar que al principio declinó la oferta de posar para la revista porque “no sabía lo que era Playboy y estaba un poco asustada”.
Algo de lo que gracias a Dios, o al fundador de la revista, se curó “al conocer a Hugh” y al ver algunos trabajos de la publicación y descubrir “lo bellas que aparecían las mujeres en las fotografías”. Ante ello, sólo se puede decir “gracias” señor Hefner.
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