Laredo, Texas / Abril 28.-
La ciudad de Laredo, Texas, se encuentra en alerta ante la posibilidad de que el virus de la influenza pueda ingresar por su frontera con Nuevo Laredo, por lo que el Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) incrementó la vigilancia en sus puentes internacionales.
El alcalde de esa ciudad, Raúl Salinas, calificó la situación de ‘muy seria’, por lo que adelantó que tomará las medidas necesarias, aunque aclaró que lo hará sin provocar caos entre los habitantes de la ciudad.
El Departamento de Seguridad Interna, la Oficina de Control de Enfermedades a nivel nacional, y el Departamento de Salud de Texas, trabajan de manera coordinada para implementar medidas preventivas, toda vez que en el Condado de Guadalupe, cerca de San Antonio, Texas, se registraron dos casos sospechosos.
“Pero no quiero dar información falsa para no crear un estado de pánico”, refirió, tras reconocer que Laredo se encuentra en alerta.
Vigilancia en puentes internacionales
Desde el domingo, los cuatro cruces fronterizos con Nuevo Laredo, mantienen una estrecha vigilancia por parte de agentes del CBP, quienes a criterio utilizan máscaras y guantes para evitar el contacto con mexicanos que cruzan la frontera, principalmente los conductores de vehículos procedentes del Distrito Federal, Estado de México, San Luis Potosí y Nuevo León.
Al respecto, Rick Pauza, vocero de la corporación, comentó que en caso de detectar una persona sospechosa de portar la enfermedad, los oficiales lo comunicarán al Centro de Prevención y Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), y tratarán el caso con reservas, utilizando el equipo preventivo.
“Hay indicaciones de que nuestros oficiales se coloquen las máscaras y también los guantes, además de colocarlas también en las personas que se sospeche porten la enfermedad, quienes serán aislados de inmediato del resto de las personas”, explicó el oficial del CBP.
El operativo fue implementado desde el domingo por la mañana, y los oficiales de dicha corporación ya están informados y tienen indicaciones de actuar ante cualquier sospecha, pero dijo que hasta el momento no se ha detectado la enfermedad entre las 30 mil personas que cada día cruzan la frontera por los dos principales puentes internacionales que comunican los Laredos.
“No importa de donde vengan los vehículos, a todos los tratamos y revisamos por igual con estas medidas, pero los oficiales del CDC son los que pueden identificar y diagnosticar la enfermedad y saber si se trata de influenza porcina, porque nos preocupa la salud de nuestros oficiales”, explicó.
Desde el domingo, la revisión en el volumen de tráfico, tanto de pasajeros como particular, es normal, pero se llevan a cabo de manera más minuciosa entre pasajeros y conductores.
Algunos de ellos ingresan a Estados Unidos con el rostro cubierto con un tapabocas.
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