México, D.F. / Mayo 2.-
Las medidas preventivas establecidas a nivel federal y estatal continúan impactando de manera directa en los centros turísticos del país debido a la considerable baja de visitantes nacionales y extranjeros, aunado al cierre voluntario de centros nocturnos, bares y restaurantes, con pérdidas millonarias aún no cuantificadas.
Luego de seis días de estar cerrados poco más de 250 bares, restaurantes y discotecas, en Acapulco se prevén pérdidas millonarias y se agravarán a lo largo del asueto que concluirá el 5 de mayo, con una caída en las ventas de hasta 30%, por lo que sus propietarios pidieron que al menos les hagan descuentos en los recibos de luz.
En Mazatlán, del 75% de ocupación hotelera que se esperaba para el largo descanso, se prevé que apenas se logre 25%, insuficiente para que los trabajadores del sector gastronómico, hoteleros, taxistas y transportistas puedan sobrevivir. Hasta ahora los restaurantes han reportado una reducción del 40% en sus ventas.
En Sinaloa, el gobierno estatal busca, con apoyo federal, establecer mecanismos de apoyo a hoteleros, sobre todo a los de Mazatlán, donde las reservaciones se desplomaron en forma significativa.
En Colima la derrama económica por turismo será de casi 50% de los esperado, ya que para esta semana se tenía prevista una ocupación del 65% y apenas llegará al 40%, con ingresos en divisas de 15 millones de pesos en lugar de los más de 30 millones considerados. Ello sólo del turismo nacional porque del internacional llega en cruceros que fueron cancelados, dijeron prestadores de servicios.
En Coahuila se cancelaron funciones de box y de lucha libre y bailes populares, eventos religiosos y deportivos de instituciones educativas, y según el gobierno estatal hubo muy buena respuesta de empresarios y organizadores, conscientes de las medidas de prevención.
En Guanajuato, propietarios de restaurantes, bares, cines y teatros, pidieron al gobierno estatal apoyo con recursos para pagar los sueldos a sus 25 mil empleados que permanecen inactivos y diseñar un programa semejante al que se aplica a empresas en paro técnico.
En Mérida, Yucatán, diputados que integran la Comisión de Salud del Congreso local comieron tacos de cochinita en el Mercado Lucas de Gálvez de Mérida en apoyo a los porcicultores cuyas ventas se desplomaron 30% por el temor de que transmita la enfermedad.
En Monterrey, Nuevo León, donde cada noche se reúnen entre 20 mil y 50 mil jóvenes a divertirse con o sin alcohol en el llamado Barrio Antiguo, los propietarios de bares dijeron que prefirieron correr el riesgo de las pérdidas económicas a que alguien resulte contagiado.
En contraste, el cónsul de Alemania en Yucatán, Johanes Nalóis Rommel, informó que la Comunidad Económica Europea dispuso que continuarán los vuelos desde los países de ese bloque hacia México para que “siga fluyendo el turismo extranjero”.
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