Ginebra, Suiza.-
Estados Unidos manifestó su satisfacción por el resultado de la votación del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas que condena la represión en Siria, pero consideró que países que votaron en contra están “del lado opuesto de la historia”.
“Personalmente creo que el resultado de hoy habla por si mismo”, dijo a Notimex la representante estadunidense de derechos humanos y embajadora Eileen Ch. Donahoe.
El Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas condenó este jueves por 37 votos a favor, tres abstenciones y la oposición de Cuba, China y Rusia los ataques y violaciones sistemáticas a civiles en Siria y demandó el acceso irrestricto a las organizaciones humanitarias.1
El Consejo “manda un mensaje realmente fuerte al gobierno de Bashar al Assad, pero también a los países que votaron en contra” (Rusia, China y Cuba), estimó Donahoe.
La diplomática estadunidense consideró que los gobiernos que se pronunciaron en contra de la resolución adoptada por 37 de los 47 miembros del Consejo, “están del lado opuesto de la historia y es un error porque deben apoyar al pueblo sirio y no al régimen de Assad”.
“Se están aislando juntos cada vez más”, señaló Donahoe.
Por su parte, la jefa de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Catherine Ashton, dió la bienvenida al debate de urgencia sobre Siria y la resolución recién aprobada por el Consejo de Derechos Humanos.
La comunidad internacional envía otra llamada inequívoca a las autoridades sirias para que cesen las violaciones de derechos humanos contra su población y para hacer frente a las necesidades humanitarias urgentes, señaló.
En este contexto, “estoy muy decepcionado de que las autoridades sirias negaron el acceso a la sub-Secretaria General para Coordinación Humanitaria, Valerie Amos y exhortamos al gobierno sirio que le permita el acceso inmediato al país”, dijo Ashton.
La UE aprecia los esfuerzos de Turquía y los países árabes en la presentación de esta resolución, copatrocinada por todos los estados miembros de la UE, y que gozaba de gran apoyo transregional.
La situación en Siria debe permanecer en el centro de la atención del mundo y deben utilizarse todas las herramientas posibles con el fin de detener la violencia y el asesinato de civiles, agregó.
“El mensaje debe ser claro: no habrá impunidad para los autores de estas violaciones graves de los derechos humanos, que, según la Comisión Internacional Independiente de Investigación (de la ONU), pueden constituir crímenes de lesa humanidad, los autores tendrán que rendir cuentas”, concluyó.
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