Washington, E.U.-
Una investigación publicada en abril pasado reveló que las armas de fuego se convirtieron en la principal causa de muerte de niños y adolescentes en Estados Unidos durante 2020.
El estudio, publicado por el New England Journal of Medicine, cita datos de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, según los cuales, hasta 2016, las heridas por arma de fuego eran la segunda causa de la muerte de estadounidenses entre 1 y 19 años de edad, sólo después de los accidentes vehiculares.
Sin embargo, desde entonces la brecha se cerró y para 2020 las lesiones relacionadas con armas de fuego se convirtieron en la principal causa de muerte en ese grupo de edad, dejando en segundo sitio a los accidentes vehiculares. De 2019 a 2020, el aumento relativo de la tasa de muertes relacionadas con armas de fuego de todos los tipos (suicidio, homicidio, no intencional e indeterminado) entre niños y adolescentes fue del 29.5%, más del doble del aumento relativo en la población general. En 2020, según los CDC, más de 4 mil 300 menores murieron por lesiones relacionadas con armas de fuego.
Como tercera causa de muerte, el estudio señala las sobredosis e intoxicaciones por drogas, que aumentaron 83.6% de 2019 a 2020 entre niños y adolescentes.
Aumenta violencia por armas de fuego durante la pandemia
La investigación subraya que si bien los nuevos datos coinciden con otras pruebas de que la violencia con armas de fuego ha aumentado durante la pandemia de Covid-19, las razones del aumento no están claras, y no se puede asumir que la mortalidad relacionada con las armas de fuego vuelva más tarde a los niveles prepandémicos.
En cambio, el aumento de la mortalidad relacionada con las armas de fuego, explica, “refleja una tendencia a largo plazo y muestra que seguimos sin proteger a nuestros jóvenes de una causa de muerte evitable. Se están realizando inversiones generacionales en la prevención de la violencia con armas de fuego, incluyendo nuevas oportunidades de financiación por parte de los CDC y los Institutos Nacionales de Salud, y se han propuesto fondos para la prevención de la violencia comunitaria en la legislación federal sobre infraestructuras. Este impulso de financiación debe mantenerse”.