Washington, D.C.-
Activistas calificaron hoy como un ataque a los niños inmigrantes a la iniciativa republicana que busca eliminar el crédito tributario que reciben los padres que contribuyen al fisco sin contar con un número de seguro social.
Si cambia la ley se tomará un promedio de mil 800 dólares del bolsillo de los padres -que carecen de un número de seguro social- que ganan 21 mil dólares en promedio por año o alrededor de 10 dólares por hora, dijo en rueda de prensa Janet Murguia, presidenta del Consejo Nacional de la Raza (NLCR).
Agregó que la legislación que busca recortar el crédito en impuestos a las personas que usan el llamado Número de Identificación Personal del Contribuyente (ITIN) aumentaría la recaudación tributaria en 2.5 mil millones de dólares a las familias migrantes, en su mayoría hispanas.
El ITIN es usado por los inmigrantes que carecen de un número de Seguridad Social para poder pagar los impuestos correspondiente a su ingreso y el Medicare, entre otros.
Ese número les permite beneficiarse de la iniciativa Child Tax Credit, aprobada en 1998, para prevenir que los niños nacidos en Estados Unidos caigan en la pobreza al permitir que a las familias con hijos se les rebajen los impuestos federales que deben pagar.
Los votantes latinos están observando cómo los políticos tratan a nuestra comunidad, dado que uno de cada cuatro niños latinos enfrentaría hambre y pobreza debido a esta iniciativa. Es duro verla como algo menos que un ataque a nuestros niños, aseveró Murguia.
La medida propuesta por los republicanos de la Cámara de Representantes ya fue aprobada en esa instancia en diciembre pasado y ahora se discute en el Senado.
La iniciativa busca obtener recursos para la ley recientemente aprobada que buscar recortar los impuestos sobre nómina.
En lugar de pedirle a los estadounidenses más ricos que paguen la parte justa de impuestos, los legisladores proponen cortar el acceso al crédito tributario por hijos a los contribuyentes más vulnerables, agregó.
Cualquier restricción al crédito tributario por hijos dificultaría a los padres trabajadores el poder cubrir las necesidades básicas de sus hijos y amenazaría además con llevar el nivel de pobreza a tasas más elevadas, dijo por su parte, Wendy Cervantes, vicepresidenta de Políticas de Inmigración y Derechos de la Niñez de First Focus.
La medida afecta directamente a lo niños mas vulnerables entre nosotros, este problema es otro ejemplo de la inconsistencia de nuestra política migratoria, indicó por su parte el arzobispo Thomas Wenski, de la Conferencia Católica Estadounidense de Obispos.
Destacó la ambivalencia de los políticos, que por un lado quieren deportar a todos los inmigrantes argumentando que no pagan impuestos y por el otro lado quieren usar las contribuciones de los inmigrantes para beneficiar al país y perjudicar a sus hijos.
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