Texas.-
Con el anuncio de la reapertura de los puentes internacionales a ciudadanos mexicanos con visa, los negocios de McAllen realizan los preparativos que permitan atender una mayor demanda de clientes.
Otros sectores como el restaurantero y hotelero también ven con buenos ojos la llegada de más personas al valle de Texas, después de 20 meses que fue restringido el ingreso a viajes no esenciales a causa de la pandemia del Covid–19.
El próximo lunes 8 de noviembre, es el día oficial que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), autorizó para la reactivación de los cruces fronterizos a extranjeros mexicanos.
En los comercios ha crecido la expectativa de las altas ventas, por lo que en el centro de la ciudad algunos propietarios de tiendas reconocen que desde hace unos días han realizado mayores pedidos de mercancía para abastecer a los visitantes.
De acuerdo con Luis Cantú, vicepresidente internacional de Negocios, Desarrollo Empresarial y Comunitario de la Cámara de Comercio de McAllen, la derrama económica de mexicanos en esa ciudad antes de la emergencia sanitaria era de mil millones de dólares en promedio cada año.
Por su parte, Roel Rodríguez, gerente el ayuntamiento, estima que los clientes que llegan de fuera representan el 30 por ciento de la economía local, lo cual se refleja en impuestos para el ayuntamiento que después se traducen en obras y servicios.
Los peajes de los puentes internacionales entran dentro de esa categoría y podrán tener un importante repunte en sus ingresos hacia ambos lados de la frontera.
La renta de vehículos, el transporte público, las bodegas de ropa y los establecimientos de saldos, son otras de las actividades económicas que esperan también que se levante el impedimento federal para que los turistas puedan cruzar hacia el lado americano y se declaran listos.
Sin embargo, además de una visa, otros requisitos para poder ingresar son tener un esquema completo de vacunación con las dosis de Pfizer/BioNTech, Moderna, AstraZeneca y Johnson & Johnson. A los menores de edad no se les requerirá estar inmunizados, pero sí tendrán que presentar una prueba PCR negativa al virus.