La Habana, Cuba / Agosto 24.-
El ex presidente cubano Fidel Castro aseguró que Cuba no tenía interés en tener una base soviética de cohetes nucleares porque ese hecho “desvalorizaba la imagen de la Revolución, su capacidad de influir en nuestra región”.
Castro evocó la crisis de los misiles de octubre de 1962, que colocó al mundo al borde de una guerra nuclear, en una reunión con científicos cubanos, entre ellos su hijo Fidel Castro Díaz-Balart, asesor científico del Consejo de Estado, informó el diario Granma.
De acuerdo con el rotativo oficial, los especialistas isleños dieron el lunes al ex presidente de 84 años nuevos criterios sobre el peligro de una guerra nuclear que, según opina, podría comenzar en Oriente Medio a partir de un supuesto ataque de Estados Unidos a Irán.
La fuente indicó que el líder platicó durante dos horas con los especialistas para hablar sobre las bombas de Hiroshima y Nagasaki, la capacidad nuclear militar de las grandes potencias, el llamado “invierno nuclear” y otros temas.
También se refirió a la crisis de octubre de 1962 tras el emplazamiento de misiles soviéticos en Cuba y el peligro de una hecatombre, así como de lo que llamó “errores” del entonces presidente estadunidense John F. Kennedy y del primer ministro de la Unión Soviética, Nikita Jruschov.
Castro insistió en “los peligros del presente, con casi 25 mil artefactos nucleares” y preguntó a sus interlocutores: “¿No les parece cosa de locos?”.
“En este pequeño planeta basta con 100 bombas para provocar un invierno nuclear. Eso no es de gente cuerda”, agregó.
Concluyó con una tesis de que “aquí todo va a depender de un hombre; no porque sea poderoso, sino porque es el único que tiene la facultad de apretar el gatillo”, una alusión al presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
La nota sobre la reunión de Castro con científicos locales coincidió con la publicación de una nueva reflexión en la que opinó que “una guerra nuclear es inevitable a partir del momento en que se cumpla el plazo del Consejo de Seguridad de la ONU”.
Esta fue una referencia al plazo dado por la Organización de las Naciones Unidas, hasta el 9 de septiembre, para que Irán permita inspeccionar sus barcos, ante el temor de que bajo la cobertura de un programa nuclear pacífico se esté preparando para fabricar armas atómicas.
Granma publicó en su sección internacional una nota de la agencia oficial iraní IRNA fechada en Teherán en la que se anuncia que Irán empezó a fabricar en serie dos tipos de lanchas rápidas para patrullaje u operaciones ofensivas, en las cuales se podrían instalar lanzamisiles.
Discussion about this post