Monterrey, N.L. / Junio 13.-
Hoy en día, nuestra cultura se ha obsesionado con la apariencia física. Hombres, mujeres, adolescentes, niños y niñas, todos los segmentos de la sociedad están atentos a cómo se ven las personas, desde la talla, peso, ropa, figura, hasta el peinado o corte de cabello que tienen.
La forma en que ves tu cuerpo afecta mucho en como te sientes contigo mismo y por ende, la actitud que tienes ante la vida y los demás. El término body image o imagen corporal se utiliza para describir el nivel de satisfacción o disatisfacción que una persona tiene sobre su propio cuerpo.
Algunos psicólogos dicen que hasta el 33% de la autoestima tiene que ver con nuestra imagen corporal. Esto quiere decir que el cómo te valoras está ligado a cómo crees que te ves. Si la imagen que percibes es mala, lo más seguro es que te sientas fatal.
Mariana es una joven de 15 años, mide un 1.74 mts, es delgada y está dentro de su peso normal de acuerdo a su complexión.
“Me gustaría bajar tres o cuatro kilos” comenta, “no me siento a gusto con mi cuerpo aunque siempre me digan que me veo bien”.
Paula, una chica de veinte años, estudiante de la carrera de Comunicación en una universidad de la Ciudad de México agrega que lo hace por salud.
“Me encanta hacer ejercicio y comer sanamente. No soporto la idea de engordar, eso no puede pasarme”, dijo.
Mariana y Paula forman parte de un gran segmento de mujeres dentro de nuestra sociedad que viven preocupadas por su físico. Esto se debe a los estereotipos marcados por la moda que provienen de los medios de comunicación y de la publicidad.
El significado de la palabra publicidad viene sobre la divulgación de noticias o anuncios de carácter comercial para vender un servicio, un producto o una idea. Diariamente estamos expuestos a publicidad de todo tipo tales como: anuncios en periódicos, revistas, televisión, cine, internet, espectaculares, etc.
La publicidad trata de convencer de que algo está mal con nosotros y que debe ser cambiado, dando como solución el adquirir algún producto o servicio. Tratan de demostrar que con ese producto vas a ser más atractivo, tendrás más amigos, te volverás más popular, en fin, que serás ¡muy feliz!
Cómo afecta a los jóvenes
En la mayoría de las revistas, se pueden encontrar anuncios que contienen imágenes de mujeres con cuerpos perfectos, ya sea con medidas 90-60-90 o cercanas a ellas. Cada año millones de niñas y jóvenes entre los 10 y 15 años, que son el grupo más vulnerable de la sociedad debido a que se encuentran en pleno desarrollo, se hacen daño con tal de tratar de parecerse a esas modelos.
Las jóvenes que compran revistas con regularidad, tienden a estar a dieta y a basar su imagen corporal en esas imágenes y también tienden a hacerle caso a los mensajes que encuentran en ellas o en páginas de internet. La mayoría de las jóvenes considera que tienen que verse o al menos tratar de parecerse a las modelos para ser bellas y aceptadas por los demás.
Estudios indican que la exposición a imágenes de mujeres delgadas, jóvenes, con cuerpos casi perfectos se asocia con depresión, pérdida de autoestima y el desarrollo de malos hábitos alimenticios que puede llevar a la anorexia o bulimia.
Una encuesta realizada por The American Research Group of Anorexia & Related Eating Disorders indica que de cada cuatro jóvenes universitarias, una recurre a métodos que no son sanos para tratar de bajar de peso, como saltarse comidas, hacer ejercicio en exceso, fumar, usar laxantes o inducir el vómito.
Otra encuesta realizada en el 2003 en Canadá, reportó que el 35% de niñas de entre 6 y 12 años han estado a dieta al menos una vez en su vida, y del 50 a 70% de las niñas que están en su peso normal creen que tienen sobrepeso. Los resultados de esto son muy trágicos ya que del 25 al 30% de las mujeres que tienen trastornos alimenticios se vuelven enfermas crónicas y el 15% muere prematuramente.
Efectos Negativos
El gran problema que proviene de todo esto es que las jóvenes tienden a asociar las imágenes de aquellas chavas sonrientes de las revistas con la idea de que son mujeres inteligentes, exitosas, bellas y muy delgadas (el peso de una modelo común es 25% menor que el de una mujer sana).
Las revistas para mujeres están plagadas de artículos que argumentan que si bajas de peso, va a ser más fácil obtener todo lo que deseas. Lo que no se dan cuenta es que detrás de esas mujeres hermosas hay todo un equipo de profesionales, que incluye: maquillistas, estilistas, diseñadores y expertos en imagen que las hace ver así.
En la mayoría de los casos las fotos son editadas y recortadas para quitar cualquier desperfecto que pudieran llegar a tener. Además otro aspecto que debemos tomar en cuenta es que los cuerpos de las modelos que aparecen en esas revistas constituyen a menos del 10% de toda la población, por lo que la gran mayoría no está así.
Cirugía Estética
Hay mujeres que aún sabiendo todo esto siguen con la firme idea de cambiar su cuerpo y recurren a la cirugía estética. La cirugía estética consiste en que un médico cambie aquellas partes del cuerpo que no son satisfactorias para el paciente.
Las más comunes entre las jóvenes son la rinoplastia y el aumento de busto. Según datos de la Sociedad Internacional de la Cirugía Plástica – ISAPS – en el año 2004, México ocupa el segundo lugar en cuanto al número de cirugías realizadas. El porcentaje de mujeres que se operan es de un 89.7% en el país y el 14.4% de las pacientes son menores de 21 años.
Tenemos el testimonio de Sofía, una joven de 22 años quien ya cuenta con dos operaciones estéticas. La primera fue una rinoplastia a los 18.
“Mi mamá prácticamente me obligó a hacerla. No le gustaba mi nariz”, dijo.
La segunda operación fue a los 21 años y consistió en un aumento de busto.
“Desde hace tres años quería aumentar el tamaño de mi busto, no me gustaba como me veía. Sí me dio miedo (la operación), pero ahora estoy feliz, puedo ponerme blusas escotadas y también ir a la playa y ponerme un bikini”, resaltó la chica de Pachuca, Hidalgo.
Pero debemos de analizar muchas cosas antes de tomar la decisión de entrar al quirófano. Sí, es verdad que una cirugía puede mejorar su apariencia y puede aumentar la confianza en sí mismo, pero no cambiará necesariamente su apariencia de manera que quede de una forma ideal, ni tampoco puede hacer que la gente la trate diferente. Antes de cualquier operación se debe de platicar con el cirujano sobre las expectativas que se tienen. Se dice que las mejores candidatas para una cirugía son aquellas que quieren mejorar su aspecto, y no perfeccionarlo. Se debe de estar saludable tanto psicológica como físicamente para poder tener buenos resultados. .
La edad también es una consideración. Muchos cirujanos prefieren no operar a las jóvenes entre los trece y los quince años sino hasta que se haya terminado su época de crecimiento que ocurre alrededor de los 14-15 años. También es importante considerar que hay un proceso de ajuste social y emocional después de la operación y hay que cerciorarse de que la joven realmente lo quiera porque una vez operada es muy difícil que pueda volver a ser la de antes.
Tipos de Cirugías
La rinoplastia o cirugía para cambiar y dar nueva forma a la nariz, es uno de los procedimientos más comunes de la cirugía estética. Con la rinoplastia se puede reducir o incrementar el tamaño de la nariz, cambiar la forma de la punta o del puente, agudizar la abertura de los orificios nasales o cambiar el ángulo entre la nariz y el labio superior.
También se lleva a cabo para corregir defectos de nacimiento como el caso de tener el tabique desviado, por sufrir alguna lesión, o también para ayudar a mejorar la respiración.
Julia, de Monterrey, N.L., se operó la nariz a los 16 años y contó su experiencia.
“Mi nariz era muy grande y sentía que con una ayudadita me podría ver mejor. Además, mi mamá siempre me decía que después de la operación me sentiría mejor y es cierto, ahora siento más confianza conmigo misma y me gusta cómo me veo”, indicó.
El aumento de busto o mamoplastia es también otra de las cirugías más solicitadas por las jóvenes. La operación consiste en la implementación de prótesis o implantes mamarios para aumentar y darles forma a los senos. Se puede aumentar de una a más tallas.
Existen diferentes técnicas para el aumento de senos con la implementación de prótesis pero la más utilizada es la técnica por vía transaxilar, la cual consiste en colocar la prótesis por debajo del músculo pectoral a través de un pequeño corte en la axila. Esta técnica no deja ninguna marca ni cicatriz por lo que se recomienda por su excelente resultado.
Los implantes mamarios son de dos tipos, unos rellenos de solución hidrosalina y otros rellenos de gel de silicón. Esta operación se realiza bajo anestesia local o general dependiendo del caso y de lo que el paciente desee.
“La cirugía plástica no es magia. Es un acto quirúrgico, como cualquier otro, que la realiza un especialista en el cuidado de la piel y de los tejidos.” A la paciente debe aclarársele qué es lo apropiado para ella, dependiendo de su estatura, contextura corporal, estilo de vida. Lo que se busca no es solamente satisfacer sus expectativas en cuanto al aumento del volumen de sus senos, sino también un resultado armónico, bonito”, resaltó Manuel Lázzaro Estévez, cirujano plástico.
Cómo prevenir
Volviendo al tema inicial de cómo las jóvenes son el sector más afectado debido a la publicidad y a las imágenes de cuerpos perfectos, existen formas en que los padres pueden ayudar y minimizar los riesgos.
Deben de tomar acción para que toda la publicidad a la que están expuestos tanto sus hijas como sus hijos de una forma negativa no les llegue de una manera tan directa. Pueden empezar por hacerlos sentir que son queridos y que son una parte importante dentro de la familia.
Los jóvenes tienen que tener cerca a la gente que quieren o tener como ídolo a personas que influyan positivamente en ellos para que no tengan que confiar y creerse todas las ideas y mensajes que ven en la publicidad o en los medios de comunicación.
También se debe de inculcarlos desde pequeños a fortalecer su autoestima enseñándoles a quererse como son, incluyendo su inteligencia, sus habilidades y valores independientemente de la raza o color que tengan. Asimismo se les debe de restringir el tiempo que pasan frente la televisión ya que entre más la vean, están más expuestos a ver este tipo de publicidad. Otra acción positiva podría ser convencerlos de que lean un libro de algún tema que les interese en vez de comprar revistas.
En lo que respecta a las mujeres, ellas pueden mejorar su imagen corporal con una serie de consejos como:
Hacer afirmaciones positivas de nosotras mismas diariamente
Vestir ropa que nos haga sentir cómodas (no muy justa ni apretada)
Cortar las etiquetas de la ropa que indican la talla
Alejarse de la Báscula
Evitar las Revistas de Moda
Tomarse el tiempo de hacer cosas buenas para nuestro cuerpo (manicure, pedicure o faciales)
Hacer ejercicio
Comer saludablemente
Siguiendo estos consejos será más fácil reconocer nuestras cualidades tanto físicas como personales. También hay que acordarnos siempre de que la gente ve lo que tú quieres que vean.
Es ya labor de cada quien el pensar lo que quiera proyectar. Además se debe de tener en cuenta de que en el mundo todos son diferentes y que así debe de ser. No hay un estándar con el cual se base a la belleza y la diversidad es y será siempre superior a cualquier estereotipo.
REDACCIÓN. Esta investigación bibliográfica fue realizada por Marcela Amarante (LMI 945056), para la clase de Géneros Periodísticos Informativos, del Tec de Monterrey.
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