Washington, E.U.-
La defensa de Joaquín “Chapo” Guzmán pidió al juez Brian Cogan que recapacite y reconsidere su decisión de que el jurado que va a dictaminar si es culpable o inocente de los 17 delitos por narcotráfico que se le imputan sea “anónimo y protegido”.
A través de su abogado, Eduardo Balarezo, el capo sinaloense insistió en que si los 12 componentes del jurado tienen estas características podría afectar su presunción de inocencia, ya que despertaría las alarmas de autodefensa y proyectaría imagen de peligrosidad hacia “El Chapo” incluso antes de que empiece el juicio.
El gobierno había solicitado que se tomara la medida especial y extraordinaria de establecer un jurado del que no se conocieran detalles personales, que estuviera aislado durante el juicio y que se protegiera todos sus movimientos por el historial de “interferencia judicial” de “El Chapo”, ante el temor de que pueda “dañarlos” a ellos o a sus familiares.
Balarezo, en un escrito dirigido al juez Cogan, reiteró en su protesta, alegando que las “razones creíbles” que se alegan para tomar esa decisión son desconocidas por la defensa, y por tanto imposibles de rebatir.
El abogado tiene previsto sacar del tema en la próxima audiencia del caso, que debe celebrarse el próximo jueves 15 de febrero en el tribunal federal del distrito este de la ciudad de Nueva York.
Ese día, todas las partes implicadas deberían establecer la fecha definitiva de inicio de juicio, después de que se pospusiera el calendario original para dar más tiempo a Balarezo a revisar los “más de 300 mil documentos, miles de horas de grabaciones interceptadas y docenas de videos”, en cifras detalladas recientemente por la fiscalía.
Las partes presentarán sus fechas propuestas: según las agendas presentadas y revisadas por EL UNIVERSAL, la fiscalía aboga por iniciar el juicio el día 3 de septiembre. Balarezo, por el contrario, prefiere que sea “no antes del 17 de septiembre”, para así apurar la temporada estival y tener más tiempo para preparar el caso.
En otro aspecto, el gobierno informó al juez que autorizó al entrega en mano de una carta de “El Chapo” a su esposa, Emma Coronel, en la que se detallan claves para poder pagar los honorarios de Balarezo y así costearse la defensa; se evita así el trámite y la burocracia del sistema postal estadounidense y se asegura que la misiva llega a su destino.
El mes pasado, la defensa de Joaquín Guzmán Loera solicitó que el jurado que le va a juzgar por 17 delitos relacionados con el narcotráfico no sea “anónimo ni protegido” como pide la fiscalía, alegando que de ser así se pondría en duda la presunción de inocencia con la que debería contar “El Chapo”.
Balarezo argumentó en una carta dirigida al juez aceptar la petición del gobierno “crearía la impresión extremadamente injusta de que es una persona peligrosa de quien hay que proteger al jurado”, algo que podría modificar la deliberación y sentencia.