Ciudad de México.-
El tiroteo que este martes dejó 19 niños y dos maestras muertas en Uvalde, Texas, además del agresor, volvió a poner en la mesa de debate el tema de la violencia armada, imparable en Estados Unidos, y una pregunta: ¿por qué Estados Unidos es el país con más tiroteos masivos en el mundo?
Sólo en lo que va de este año se han registrado 212, de acuerdo con el Gun Violence Archive (Archivo de la Violencia Armada). En contraste, entre 1996 y 2012 hubo 90.
En muchos de los casos, los atacantes tenían algún tipo de problema mental. En el caso de la masacre de la Escuela Primaria Robb, aunque no se ha reportado que Salvador “N”, el joven de 18 años que disparó a su abuela, a niños y profesoras haya tenido algún padecimiento mental, gente que lo conoció afirma que tuvo una infancia muy complicada, con problemas de bullying, con una familia rota, con una madre aparentemente adicta a las drogas.
Algunos expertos apuntan al fenómeno de la imitación. En el caso de la masacre de Búffalo, donde un supremacista blanco ingresó a un supermercado específicamente para matar a negros, el agresor se inspiró en la matanza de Christchurch, Nueva Zelanda.
La existencia de este tipo de grupos radicales, que se comunican fácilmente en redes sociales, también contribuye a atizar violencias y odios.
Aunque no es el único país con grupos radicales, o personas con problemas mentales, o donde puedan atacar terroristas, a diferencia de lo que ocurre en otros lugares, en Estados Unidos la Segunda Enmienda, que protege el derecho a poseer y portar armas, es sagrada y defendida a muerte por el poderoso lobby de las armas, la Asociación Nacional del Rifle (ANR). Y con ella, los republicanos, que reciben millones de dólares para campañas y en apoyos, a cambio de no tocar dicha enmienda.
Con la facilidad que hay para adquirir armas –literalmente hasta en una tienda de autoservicio-, Estados Unidos tiene, por mucho, más armas que cualquier otro país. De acuerdo con un recuento de la cadena CNN, hay entre 270 y 310 millones de armas circulando en suelo estadounidense. Considerando que la población es de 319 millones, eso implica que casi cada estadounidense posee un arma.
La Asociación Nacional del Rifle (NRA)
La Asociación Nacional del Rifle es uno de los grupos de interés más influyentes en la política de EE.UU., no solo por el dinero que gasta en presionar a los políticos, sino también por el nivel de compromiso de sus cinco millones de miembros.
La NRA se opone a la mayoría de las propuestas para fortalecer las regulaciones sobre armas de fuego y está detrás de los esfuerzos a nivel federal y estatal para revertir muchas restricciones existentes sobre la posesión de armas.
En 2016, la NRA gastó 4 millones de dólares en cabildeo y en contribuciones directas a políticos, así como más de 50 millones de dólares en campañas políticas, incluidos aproximadamente 30 millones de dólares para ayudar a elegir al presidente Donald Trump.
Su presupuesto anual es de aproximadamente 250 millones de dólares, que se destinan a programas educativos, eventos para sus miembros, patrocinios, defensa legal y esfuerzos relacionados.
Y, más allá de los números, la NRA es conocida en Washington como una fuerza política capaz de encumbrar o derribar incluso a los políticos más poderosos.
La asociación califica a los políticos según sus votos y utiliza sus recursos y los de sus miembros -tanto financieros como organizativos- para apoyar a sus más fieros defensores y derrotar a sus oponentes más tercos.
¿Podría cambiar? Los grupos a favor de un mayor control de armas, respaldados por benefactores ricos como el exalcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, se han organizado más en los últimos años, intentando igualar el poder político de la NRA.
De hecho, en 2018, gastaron más que la NRA en las elecciones de medio periodo, en las que algunos demócratas prominentes a favor del control de armas ganaron reñidas contiendas.
Paralelamente, sus ingresos en 2017 se redujeron en 56 millones de dólares, en su mayoría por una disminución de las cuotas de afiliación. Sin embargo, ese año la NRA recaudó 378.1 millones de dólares, lo que garantiza seguir siendo el actor más influyente en el debate sobre armas de fuego.
India el segundo país con más armas circulando
India es, después de Estados Unidos, la nación con más armas circulando: 46 millones, para una población de más de mil 200 millones, señala CNN.
Un estudio del Centro de Investigaciones Pew muestra que poco más de un tercio de estadounidenses dice que alguien en casa posee un arma.
La facilidad de hacerse de un arma 3D, que no tiene número de serie y por tanto no deja rastro, es otro factor que contribuye a que más personas, de las que no hay registro, se hagan de un arma con fines violentos.
Estudios que cita la cadena noticiosa indican que la gran diferencia entre lo que ocurre en Estados Unidos y en otros países son leyes más estrictas sobre la adquisición y posesión de armas.
Por poner dos ejemplos, en Australia, que entre 1987 y 1996 registró cuatro tiroteos masivos, eso bastó para que el Parlamento aprobara leyes más estrictas. En Nueva Zelanda, tras las masacres en dos mezquitas en Christchurch, el gobierno aprobó una ley que prohíbe prácticamente en su totalidad la posesión, por parte de civiles, de rifles de asalto y armas semiautomáticas. Después de eso, se frenaron los ataques.
Pero en Estados Unidos, los millones de dólares que el lobby de las armas da a los políticos para campañas y demás vuelven misión imposible el debate de leyes más restrictivas.