Ciudad del Vaticano.-
Benedicto XVI sufre más por las infidelidades y las incoherencias en la Iglesia, así como por los abusos sexuales contra menores cometidos por sacerdotes, antes que por los chismes de El Vaticano, afirmó hoy Federico Lombardi.
El director de la sala de prensa de la Sede Apostólica y portavoz pontificio trazó un balance con motivo del cumpleaños número 85 del obispo de Roma, festejado este día, y del aniversario número siete del actual papado, que se cumple el jueves próximo.
“En lo que respecta a la Iglesia ha ciertamente sufrido (Joseph Ratzinger) por los aspectos de incoherencia y de infidelidad a su misión y a su dignidad”, dijo a los micrófonos de la Radio Vaticana.
“En estos años hemos visto también, con mucho sufrimiento, todo el debate a propósito de los abusos. Me parecen estas las cosas por las cuales el Papa puede sufrir más que por los chismes internos”, añadió.
Sostuvo que los problemas por los cuales el líder católico siente más preocupación son aquellos relacionados con la secularización, del olvido de Dios, del relativismo y de la pérdida de referencia de la orientación de tantas personas en la época moderna.
Para el vocero, durante el pontificado de Benedicto XVI, la Iglesia se ha concentrado en lo esencial de su misión, es decir en dar prioridad a la relación del hombre con Dios, a la dimensión trascendente de la vida y a la personalidad de Jesucristo como revelador del verdadero rostro de Dios.
Gracias a esta dimensión los aspectos de carácter y de poder de la Iglesia se han vuelto cada vez más secundarios y esa, dijo, puede ser una de las características de este pontificado.
Lombardi destacó además que de la personalidad de Benedicto XVI impacta su gentileza y su atención, su relación cercana con las personas: escucha de verdad a su interlocutor y lo hace con grandísimo respeto. Tiene, además, lucidez y claridad de pensamiento y expresión.
“Aun habiendo comenzado este ministerio en edad bastante avanzada, se trata de un pontificado muy rico e intenso, con tantos viajes y eventos muy importantes, con un magisterio múltiple. Debemos, por eso, decir que el Papa logró realizar en estos siete años una cosa admirable”, apuntó.
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