Washington, D.C. / Diciembre 17.-
Con poco más de 30 mil víctimas en la contabilidad de la guerra ante el crimen organizado en México, el diario “The New York Times” pidió a la administración del presidente estadounidense, Barack Obama, ayudar a terminar “el baño de sangre” con la emisión de una orden ejecutiva para frenar la venta múltiple de armas de asalto.
El diario, que retoma el más reciente informe elaborado por la Oficina del Inspector General de Justicia, que destaca “las dificultades de la agencia para combatir el contrabando de alcohol, tabaco, armas y explosivos (ATF) para irrumpir en el tráfico ilegal de armas a México”, argumenta que ante la dificultad de legislar contra las armas de asalto durante la próxima Legislatura, Obama debería tomar una decisión al respecto:
“Al entrar un Congreso con más presencia republicana, y ante el abierto temor de los legisladores demócratas al cabildeo de la industria de las armas, hay poca expectativa de coraje para legislar”, consideró el editorial del diario neoyorquino.
“Si lo que se requiere es una orden ejecutiva para poner fin al baño de sangre, el presidente Obama no debería vacilar en hacerlo”, dijo.
El pronunciamiento ocurre tras las revelaciones hechas por el diario “The Washington Post” luego de una investigación, de más de un año, en la que evidencia la laxitud de las leyes estadounidenses para controlar la compraventa de armas de asalto que van a parar a terceras naciones como México.
“El Congreso, hechizado por el lobby de las armas, no ha hecho nada respecto al vacío legal” que ha permitido a los comerciantes la venta múltiple de armas de asalto, como AK-47, sin tener que reportarla a las autoridades, denunció el diario.
En mayo pasado, el presidente Felipe Calderón pidió al Congreso estadounidense el restablecimiento de la prohibición a la venta de armas de asalto, que siguen dando poder al crimen organizado.
Su petición fue respondida de inmediato por la Casa Blanca, al afirmar que si bien respeta las preocupaciones de Calderón, la administración Obama no tiene la intención de impulsar un proyecto de ley en ese sentido.