Washington, D.C.-
El presidente estadounidense, Donald Trump, considera que las declaraciones de James Comey, el destituido director del FBI, ante una comisión de inteligencia del Senado la víspera justifican totalmente su comportamiento.
“Pese a tantos falsos testimonios y mentiras, esto es una justificación total y completa (…) y WOW, ¡Comey es un filtrador!”, tuiteó el mandatario en su primera reacción pública tras la comparecencia.
Tras casi dos días de silencio en Twitter, Trump compartió con sus 31 millones de seguidores en esta red social la opinión de Alan Dershowitz, profesor de Derecho de Harvard, quien considera que no hubo obstrucción a la justicia por parte del presidente.
Según la cadena de televisión CNN, Marc Kasowitz, abogado personal de Trump, prevé presentar una queja ante el Inspector General del Departamento de Justicia contra Comey por filtrar a la prensa notas personales sobre sus conversaciones con el presidente. Sin embargo, sus notas privadas no estaban clasificadas como secretas.
Durante su comparencencia el jueves ante el Comité de Inteligencia del Senado, Comey confesó que, tras ser despedido por Trump de su puesto, compartió sus notas personales con un amigo, al que pidió que se las filtrara a la prensa porque consideraba que el público debía saber lo que había pasado.
Corey Lewandowski, ex jefe de campaña de Trump, criticó en Fox News a Comey, de quien dijo que tiene “credibilidad cero”.
Comey acusó el jueves a Trump de despedirlo para hacer descarrilar una investigación sobre la presunta injerencia rusa en las elecciones estadounidenses y de mentir sobre los motivos de esa destitución. Trump despidió a Comey señalando que el FBI era ineficiente bajo su dirección.
Comey aseguró además haber sido presionado por Trump para poner fin a la investigación del FBI de los contactos con Michael Flynn, ex asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca.
Sin embargo, Comey confirmó que Trump no había sido puesto bajo investigación federal.
Además, Comey admitió que tras su destitución por Trump el 9 de mayo, pidió a un amigo que filtrara a la prensa documentación sobre el contenido de las reuniones con el mandatario con la esperanza de provocar el nombramiento de un fiscal especial para el caso.
El Departamento de Justicia nombró a Robert Mueller, predecesor de Comey como director del FBI, para liderar una investigación independiente sobre la injerencia rusa en las elecciones, el caso Flynn y otros aspectos de la campaña electoral de 2016.
Durante la comparecencia de Comey el jueves e inmediatamente después, Trump permaneció en silencio, permitiendo a su abogado personal hablar en su nombre.
Kasowitz insistió tras la vista en que el presidente “nunca intentó impedir la investigación” del FBI sobre a interferencia rusa en las elecciones de 2016, citando el propio testimonio de Comey. También un portavoz de la Casa Blanca dijo que Trump no era un mentiroso, como lo llamó Comey.
Trump hablará hoy en una rueda de prensa conjunta en la Casa Blanca con el presidente rumano, Klaus Iohannis.