México, D.F.- María del Rosario Fuentes Rubio amaba la vida y creía en la gente. Intrépida, valiente y noble, alertó e intercedió por muchos a través de las redes sociales y en persona, hasta quedar en riesgo. Hoy está desaparecida, en medio de versiones de que fue asesinada por las fotos que subieron a su cuenta que fue hackeada; probablemente nunca volverá a ver a su pequeña hija ni a su pareja.
Robusta, de piel blanca, ojos grandes y una abundante melena lacia, vivía el día a día con intensidad y alegría: “Hay dos cosas que no se pueden negar en la vida, estar feliz y estar borracho.
Yo estoy feliz, porque soy tamaulipeca, porque amo a mi comunidad, amo mi trabajo, amo mis valores.
Y todos los días trabajo para hacer de mi pedacito de Tamaulipas un lugar mejor”, escribía con frecuencia.
Dedicaba tiempo para convivir con su familia y en especial para cuidar a su bebé; ejercía su profesión de médico en un hospital; realizaba labores altruistas y gustaba de interactuar con la gente a través de las redes sociales como Facebook y Twitter.
La doctora tenía “un sentido de responsabilidad social muy fuerte; es el tipo de persona que uno se siente orgulloso de conocer y ser su amigo; desafortunadamente, confiaba mucho en las personas”, comenta quien administra Valor por Tamaulipas, una cuenta en Facebook y en Twitter que alerta sobre situaciones de riesgo ligadas con el crimen organizado en el estado.
Aclara que María del Rosario, que se identificaba con el seudónimo de Felina no estuvo en Valor por Tamaulipas.
“Ella no me conocía a mí, por lo menos yo no le dije mi identidad, pero yo sí la conocía a ella, porque inicialmente participó desde su cuenta personal (@Miut3)”.
A mediados de 2012 nacieron dos cuentas aliadas a Valor por Tamaulipas: Esperanza por Tamaulipas y Responsabilidad por Tamaulipas, a Fuentes Rubio se le invitó a administrar la segunda y la doctora aceptó con agrado.
“Responsabilidad por Tamaulipas está para apoyar causas nobles que requieran la participación ciudadana responsable y en verdad estoy encantada de ser la administradora de esta página y de interactuar con ustedes”, comentó María del Rosario.
Iniciaba la sesión con un saludo y la invitación a participar.
Durante el día intercalaba peticiones de enfermos que requerían donadores de sangre con mensajes personales y motivacionales; publicaba fotos de personas extraviadas, así como campañas de prevención de males, como cáncer y dengue.
Los fines de semana escribía de la importancia de la familia; incluso, se animó a publicar una imagen donde convivía con la suya, con la siguiente leyenda: “Les comparto, disfrutando en familia, carnita asada, bebidas a base de cebada y levadura, muy nutritivas y ricas, bien heladas, guacamole.
PERO LO MEJOR CONVIVIR EN FAMILIA (Sic)”.
COMPROMISO CON LA SOCIEDAD
Fuentes Rubio administró Responsabilidad por Tamaulipas hasta los primeros meses de 2013.
Fue removida, como una medida de protección, cuando la delincuencia organizada puso precio a la cabeza del creador de Valor por Tamaulipas.
Por unos días, las tres cuentas aliadas Valor por Tamaulipas, Responsabilidad por Tamaulipas y Fortaleza por Tamaulipas dejaron de publicar, pero Fuentes no; entonces lo hizo desde su cuenta personal.
En @Miut3 hacia labor social y en ocasiones alertaba de situaciones de riesgo, lo hizo hasta el pasado 15 de octubre cuando fue secuestrada, al salir de su trabajo.
Fuentes Rubio trabajaba en el área de medicina de una maquiladora, en Reynosa.
La Procuraduría General de Justicia de Tamaulipas reveló que posiblemente la profesionista tuvo problemas con civiles armados que se llevaron a un herido de bala al hospital Miravalle de Reynosa, donde ella laboraba.
El miércoles 8 de octubre la doctora renunció al hospital y se incorporó a una empresa del sector industrial, de donde la habrían privado de la libertad el miércoles 15 de octubre, según la Procuraduría.
A la administración de Valor por Tamaulipas no le convence esta línea de investigación e insiste que “Miut3 en sus labor altruista también llegaba a exponerse, y varias personas del Hasthag donde participaba la conocieron cuando se integró en actividades públicas de ayuda a la comunidad”.
En memoria de la bloguera pidió a sus más de 500 mil contactos que sigan reportando situaciones de riesgo, pero cuidando su identidad anónima.
“No se rindan que Miut3 no les perdonaría que se rajaran”.