México, D.F.-
Realizada decenas de veces, la travesía aún provoca emoción, nerviosismo y responsabilidad. Eulalio López “Zotoluco” viajó este lunes a la capital española para poner en marcha su preparación en el campo bravo, de cara a la cita más ambiciosa que cumplirá en esta temporada, su regreso a la Feria de San Isidro después de siete años.
“Brincar el charco siempre da ilusión”, admite el maestro de Azcapotzalco. “De lo que se trata el viaje es de prepararme, de mentalizarme y estar metido de lleno en el campo”, agrega el diestro, quien comparte algunos detalles del plan de trabajo que seguirá los próximos días en distintas ganaderías ibéricas.
“Llegando nos vamos a Valencia para ver a Silveti”, dice “Lalo”, sobre la comparecencia de Diego en Fallas, este miércoles, al lado de Thomas Dufau y Jiménez Fortes, ante toros de Valdefresno. “Estamos ahí un par de días y nos vamos a Cáceres, donde tentaremos en varias ganaderías y, después, viajamos a Sevilla. Remato el viaje en Madrid y regreso a México para torear en la Feria de Aguascalientes. Voy a estar metido en el campo entre Cáceres, Sevilla y Madrid”, detalla “El Zotoluco”.
La primera figura del toreo no se confía, toma previsiones. Hace casi siete años de la ocasión más reciente en la que su muleta poderosa templó la embestida española -menos suave y generosa que la del ganado nacional-, ningún tentadero ibérico está de más, cuando el ruedo que lo espera es de la Plaza de Las Ventas de Madrid, en el ciclo taurino más importante de cuantos se celebran en el mundo.
“La preparación es importante, hace varios años que no tengo contacto con el ganado español y a eso voy, a prepararme, a mentalizarme, porque el compromiso de San Isidro es muy fuerte”, admite el diestro.
“Hay mucha diferencia entre la embestida del toro mexicano y el español”, subraya. “Obviamente, el motivo del viaje es también tratar de irle agarrando esa embestida a las vacas y a algunos toros que mate a puerta cerrada.
El ambiente allá es muy profesional, desde el campo hay que estar muy bien, tratar de torear lo más posible y aprovechar el viaje”, agrega el de Azcapotzalco.
A la espera de conocer la fecha en que hará su paseíllo número 13 en el coso venteño, así como los alternantes con los que compartirá créditos, el maestro de Azcapotzalco viajó cargado de expectativas -en compañía de su apoderado Alonso Cuevas- y dispuesto a gozar de la profesión que lo convirtió en primera figura hace más de una década.
“Voy a hacer lo que me gusta”, subraya Eulalio. “Voy a disfrutar el campo bravo español que en su mayoría es padrísimo y a tratar de empaparme de todo lo que pueda; viendo toros, toreando y mentalizándome no sólo para España, sino también para la Feria de Aguascalientes, donde estoy anunciado tres tardes”, señala.
“Voy con todo el profesionalismo a prepararme para lo que viene, desde que supe que regresaba a San Isidro, así lo he tomado”, finaliza “Lalo”.
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