David Cabrera nunca perdió la fe por volver

México, D.F.-
Jamás perdió la fe, sin importar que daba la impresión de que su castigo podría ser perpetuo.
David Cabrera fue uno de los cuatro suspendidos, tras aquel oscuro episodio con prostitutas en Ecuador, que no aparecieron en la lista del Tricolor Mayor para el amistoso contra Venezuela, del 25 de enero.
Jonathan dos Santos, Jorge Hernández y Néstor Vidrio fueron los tres restantes. Marco Fabián, Javier Cortés, Néstor Calderón e Israel Jiménez, sí recibieron el llamado por parte de José Manuel de la Torre.
Las suspicacias en su entorno fueron inevitables, pero el contención se mantuvo estoico, seguro de que regresaría al equipo nacional.
“Sabía que es ir paso a paso. Ahorita, en Selección Mayor, hay gente importante en el mediocampo”, recuerda el volante de los Pumas. “Tampoco quiero decir que no estoy al nivel de ellos para competir, sino que demostraron y tuvieron un torneo bueno, clasificaron a la Liguilla con sus equipos, así es que es estar tranquilo”.
“No me sorprendió [que sí convocaran a cuatro], porque sé de la calidad de ellos. Pudieron ser llamados desde antes, si no hubiera estado el castigo. No me dio temor y lo único que hice fue trabajar”.
Reponerse al duro mazazo que significó aquella experiencia fue casi instantáneo. Al chico le agradaría que no se hablara tanto del desliz, pero entiende que sólo lo conseguirá si ofrece buenos resultados dentro del lienzo verde.
“Eres imagen pública, primero que nada, y un ejemplo para los jóvenes o niños que quieren ser futbolistas y no puedes dar este tipo de escándalos”, reconoce, con cierta pena. “Estamos conscientes de que fue un error y ya lo dejamos atrás”.
“Lo que más me gustaría es hablar de lo que viene, ya no pensar en el pasado, para que todos dejemos atrás eso y tengamos un buen torneo”.
Filosofía que también aplica para no cargar con la eliminación en el selectivo rumbo a Beijing 2008.
“Son estadísticas, simplemente. Circunstancias que pasaron hace más de cuatro años y nosotros no tenemos que voltear para atrás ni hace cuatro años, ni hace seis meses, ni hace dos”, aconseja. “Tenemos que estar conscientes de que lo que viene es importante y no será nada fácil estar allá [en los Juegos Olímpicos]. Hay que ir paso a paso”.