México, D.F.-
Jim Miller tiene ante sí una pelea importante ante Nate Diaz, por lo que toda su atención se ha centrado en ella, sin embargo, se da tiempo para soñar y, asegura, se ve como campeón de peso ligero en la UFC, aunque sabe que el camino por recorrer aún es largo.
Miller, de 28 años, no promete nocaut, le gustaría, sí, pero sabe que Díaz es un peleador de gran nivel, que le complicará en todo momento la pelea del sábado 5 de mayo en Las Vegas, Nevada.
“Espero que sea una pelea dura, siempre voy a pelear hasta el final. Un nocaut sería grandioso, pero Nate es un gran peleador y será difícil, estoy listo para cualquier escenario”, comentó en entrevista vía telefónica.
Para el combate, Miller destacó la preparación que tuvo, pues practicó lo básico, sus golpes, su combate cuerpo a cuerpo, pero siempre cuidándose para no sobrecargarse físicamente.
“Entrené muy fuerte para esta pelea, hice algunos cambios en mi entrenamiento para prepararme para una pelea de 25 minutos, me siento muy bien”, agregó.
Sobre su futuro en la UFC, el peleador sabe que dependerá de la pelea ante Díaz, por lo que quiere centrar su atención en la misma, aunque no deja de soñar con, algún día, ser campeón de su división.
“Espero ser campeón en el futuro. Sé que puedo vencer a cualquiera de estos muchachos, puedo derrotar a cualquiera, entonces, mi meta es siempre dar lo mejor, en cada pelea que tenga, sé que si hago eso seré reconocido como el mejor, pero si no, estaré tranquilo por haber hecho mi mejor esfuerzo”, destacó.
Miller ha aprendido algo de cada uno de sus combates, cada uno le ha enseñado algo distinto. Para prepararse analiza a sus rivales, los descifra y de ahí decide la mejor estrategia para enfrentarlos, lo cual ha resultado clave para su ascenso en la UFC.
“Veía UFC cuando era chico, quería hacerlo, pero no había hecho ese esfuerzo y, después, cuando tenía 21 años, empecé a entrenar. Desde ahí he progresado bastante, en seis meses tuve mi primera pelea…”.
Y desde entonces, Miller ha tenido un ascenso vertiginoso: 24 peleas disputadas, 21 victorias y sólo tres caídas. El sábado, ante Nate Díaz, tiene un nuevo reto.
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