México, D.F.-
Aunque el director y guionista Tony Wakefield es una persona apasionada de los temas paranormales, su ópera prima que lleva por título “Mala Luz” no busca ser una película de terror o suspenso al estilo de la meca del cine, Hollywood, para evitar un filme que la gente pueda tachar de malo.
“Quise hacer una película que a mí me encantaría ver, más que tratar de impresionar”, explicó el director de cine.
Por eso durante cuarto años trabajó en la historia de Eric y Mari, una pareja que decide emprender un viaje al sur del país para tratar de arreglar sus diferencias, pero sucede que ella desaparece misteriosamente.
Y es a partir de ese momento que el elemento sobrenatural se hace presente en la historia, pero de manera sutil según explicó Wakefield:
“El reto más grande es hacer algo sin abusar del gore o los efectos especiales, donde realmente el suspenso surja por la trama, los personajes, las situaciones que se están dando, más que de la parafernalia”.
Para lograr su cometido de llevar “Mala Luz” a las salas cinematográficas, Tom encontró el apoyo Río Negro, productora de Matthias Ehrenberg y Ricardo Kleinbaum, quienes tomaron el riesgo de abordar por primera ves una historia de thriller paranormal, como ellos la definieron. Matthias explica que algo que los decidió a apoyar el proyecto, es que el guión no se basa en clichés.
“Se trata de una historia de amor que está enmarcada en un universo paralelo.
“Las cosas que aquí pasan pueden suceder en la vida real, creo que eso es lo que va a salvarnos de que entremos en una cosa chafa”, dijo el director del filme.
Actores de retos
Para lograr un thriller convincente eran necesarios buenos actores, por eso eligieron a Raúl Méndez y a Salvador Sánchez, además de apostar por un nuevo talento, la actriz regia Patricia Garza.
Méndez explicó que de inmediato la historia lo atrapó, además de que gracias a su experiencia con” Km 31”, se ha dado cuenta que a la gente le fascina que la asusten.
“A mí lo que me impresionó fue la historia, de hecho leí el guión y se lo comenté a mi esposa y me decía ‘¿qué sigue?’, y le digo ‘no, hasta que la veas”, comentó Salvador Sánchez.
Y por su parte, Patricia Garza dio su opinión al respecto: “Es una historia que está arriesgando de cierta manera algo y a mí me gusta hacer los trabajos justo por eso, porque son personajes que van más allá de lo que he hecho hasta ahorita”.
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