México, D.F. / Febrero 24.-
Como si de una ave fénix se tratara, Nuria Diosdado está lista para resurgir. Tras ser castigada un año por dopaje en los Juegos Centroamericanos de Mayagüez, la seleccionada de nado sincronizado alista sus mejores rutinas para probar su calidad.
“En los Juegos Panamericanos de Guadalajara tendré una dulce venganza. Si quieren ver quien es Nuria, lo voy a demostrar. Pese a la sanción en ningún momento me fui para abajo, nunca dudé de mi capacidad”, relató la ondina.
Con mirada expresiva y firmeza en sus palabras, Nuria reveló lo difícil que ha sido para ella enfrentar las críticas y miradas inquisidoras.
“Fue un trago muy amargo, todavía sigo pensando en eso casi todos los días pero ya le he visto el lado bueno. Agradezco a la vida que me haya puesto la prueba porque me hizo ser más fuerte y el equipo se unió más. De las cosas malas siempre sale algo bueno”, señaló.
Pese al castigo, la sirena podrá participar sin problemas en la capital tapatía pues éste culmina el próximo 8 de septiembre. Para la cita, el representativo nacional ya prepara una rutina de música tradicional.
“Queremos que la gente se involucre, por eso tenemos música de mariachi para que nos apoyen y tengamos un excelente resultado. Queremos brillar en casa y dar el 200 por ciento para subir al podio. Ahora somos un equipo mucho más fuerte que en 2007”, aseguró.
Llegar hasta el oro resulta una meta casi utópica para las seleccionadas. El nivel de Estados Unidos y Canadá está aún muy por encima del de las tricolores por lo que tienen la vista puesta en Brasil.
“Estamos trabajando duro la técnica para darle pelea a los cariocas por el bronce. Nuestras rutinas están más rápidas que antes, más llamativas. Muchas tenemos varios años en la selección y contamos con las suficientes armas”, comentó.
Hasta el momento se tienen 12 ondinas preseleccionadas. Será hasta mediados de año cuando se tenga una lista definitiva de las sirenas que buscarán mejorar el cuarto lugar obtenido hace cuatro años en Río de Janeiro.